¡¿EN EL CAMERINO?! HOT -RUGGAROL

Capitulo 8

Veía mi celular sonriendo, a veces me reía por las ocurrencias de las fans, me encantaba como se alteraban por Karol y yo estando juntos sentados y sonriendo a cada segundo, aunque igual, de todas maneras si yo me viera desde su punto, también pensaría que ahí pasa algo raro, y si que lo pasa. Caminaré a su camerino más tarde, pero antes, debo llamar a Cande, me ha dejado un montón de mensajes y llamadas, que obviamente no he contestado porque he estado en la entrevista y ella lo sabía.

Un toque, dos toques, el tercero y.....

*Teléfono no disponible en este momento*

-Claro..''ocupado''.- dije para mi mismo.- Si siempre está con su celular en la mano, estoy seguro que me rechazó la llamada, y está bien...si quiere estar así....okay.

Los chicos no estaban en la habitación en este momento, todos se fueron a comer ya que hicieron muchísimas cosas, tanto saladas y dulces para que nadie se quede sin nada.

Comencé a caminar hasta el camerino que tenía el letrero con el nombre de aquella belleza.

''Karol Sevilla''

Toque dos veces y escuche su voz.

-¡Ya va!.-la vi una vez que abrio la puerta y me miro con aquellos ojos verdes que me encantaban.- Oh, hola.

-Hola, ¿estás sola?

-Ajá, adelante.-me sonrió picara y una vez que entre, cerró la puerta con seguro.- Faltan dos horas para el show, será divertido..-no me miraba, estaba de espaldas. Quería tocarla, sentir su cuerpo. Me acercaba de a poco a ella para abrazarla por detras, cuando ella de golpe se dio vuelta y me empujo hasta el sillón, sentandome.

Le sonreí y comencé a sacarle su abrigo, ella me detuvo cuando se dio cuenta de que estaba intentando hacer.

-¿Qué pasa?, ¿no quieres hacer esto?.-pregunte preocupado.

-No es eso.-bajo la mirada.- primero..-me volvió a mirar.- quiero tocarte a ti. Tú ya lo haz hecho conmigo, quiero intentarlo...¿Puedo?

Oh. Esto será divertido.

No respondí y solo me saque mi abrigo para que se le sea más fácil seguir con la camisa, me puse cómodo en el sillón, Karol se sentó encima mio, y me comenzó a besar el cuello lentamente, siguió con su recorrido a las mejillas, y llego a mi boca, jugueteábamos con nuestras lenguas hasta que por culpa de nuestras respiraciones nos separamos. 

Con sus manos me sacaba despacio cada uno de los botones de mi camisa, me estaba haciendo sufrir. Su cara estaba muy caliente, que inocente es, quiero tocarla, saborearla, pero no me lo permite. Una vez mi torso estaba completamente desnudo hizo una pausa para observarlo, y sin previo aviso comenzó a hacerme un chupón en mi pecho, ya estaba más que excitado.

Comenzó a tocar mi entrepierna lentamente por sobre la ropa.

-¿Cómo....cómo estás?-¿A qué se refería con esa pregunta?, mi estado anímico estaba al limite, ¡¿no se da cuenta?!, me estoy poniendo histérico con cada toque que me da.

-Sigue adelante...Estás haciéndolo increíble.- sonreí de lado y ella rió tiernamente.

Se agacho y me bajo el cierre. Detuve sus manos para que yo mismo me pueda bajar los pantalones. Ahora estaba solo en ropa interior. Karol estaba asustada, se le notaba en su mirada. 

-Tócalo.

-S-sí.-Metió su mano dentro de mis boxers y tiro fuertemente de mi miembro.

-¡AAAAAAAAH!.-Grite de dolor.-¡ME VAS A DEJAR ESTÉRIL!

-P-perdón...nunca he tocado uno...

La mire, y maneje su mano junto con la mía, haciendo un movimiento de arriba hacía abajo, y sin detenerlo.

-Es así...

Deje que lo hiciera sola, su mirada estaba clavada en mi. Comencé de a poco a exaltarme, cada vez lo hacía más rápido.

-¿Te gusta?.

SÍ, ME ENCANTA.

-S-sí.- me sujete de ella, estaba por llegar al climax

Cerré mis ojos fuertemente, hace ya un tiempo que no me sentía tan exaltado. Con Cande había pasado un tiempo de que no teníamos sexo, y esto para mí estaba siendo el paraíso. Sentí como su boca estaba en mi miembro, me asuste, ¿de donde aprendió a hacer esto?

Esto era lo mejor, estaba apunto de llegar, y ella me estaba masturbando con su boca. Le agarré despacio su cabeza para que no se detuviera. Me miraba con sus hermosos ojos verdes mientras me succionaba, y una, dos, tres.

Me aferre de ella y acabe en su boca.