Capitulo catorce...

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La salud de Astoria había empeorado,  cada vez se acercaba mas al final, Draco no sabia que hacer, simplemente no deseaba que su esposa estuviera sufriendo, pensar en su hijo solo hacia que se sintiera peor, Beth estaba en su quinto año en Hogwarts, mientras Scorpius y Albus en tercer año

- Draco- saludo Samantha al rubio que se encontraba con la mirada perdida- ¿para que me llamaste?- pregunto

- Astoria... quiere hablar contigo- dijo el, con un hilo de voz, Samantha asintió y el rubio le señalo las escaleras 

-¿puedo?- pregunto la rubia abriendo la puerta lentamente

- adelante- hablo una voz débil, Samantha entro a la habitación y se encontró con Astoria que estaba recostada en la cama con un mal semblante, Samantha se sentía mal al verla en ese estado

- ¿querías verme?- pregunto la rubia sentándose en una orilla de la cama, la castaña asintió con dificultad

- quiero pedirte algo- la voz de la mujer estaba demasiado débil, Samantha se dio cuenta de que en verdad ella estaba muy mal

-lo que quieras- la rubia tomo la mano de Astoria delicadamente- haré lo que me pidas- ella le sonrió débilmente

- quiero que cuides de Draco y de mi hijo... cuando ya no este- Samantha negó levemente con la cabeza - no lo hagas por mi... hazlo por el amor que sientes por el- Samantha sintió un vuelco en el estomago, al escuchar esas palabras

- estarás bien, Astoria, eres una mujer fuerte y se que saldrás de esta - los ojos de la rubia habían comenzado a llenarse de lágrimas, ¿como podía sentir tanta pena por ella? simple, el corazón de Samantha era noble, tanto que nunca le reprocho que ella fuera la mujer del que fue el amor de su vida

- se que no sera así- contesto la castaña- quiero saber que cuento contigo- dijo firmemente tomando la mano de Sam con las fuerzas que no tenia, la rubia se limito a asentir- Gracias- dicho esto Astoria le dedico una sonrisa a la rubia- ¿puedes llamar a Draco?- volvió a asentir y salio de ahí, un paso fuera de la habitación y las lagrimas que había contenido salieron sin permiso de sus ojos

Draco subió a su habitación en cuanto Samantha le comunico que su esposa lo esperaba y ahí se encontraba la rubia, mirando sin mirar, mientras los flashes de recuerdos se apoderaban de su mente


- te dije que esa... no era para nada una santa- Samantha se llevaba un bocado de pastel a la boca sin despegar los ojos del rubio que se encontraba parado en la entrada del gran comedor en compañía de Astoria- no se que le ha visto Draco a esa...

- por favor Pansy- recrimino molesta la chica- Astoria no tiene la culpa de nada, en todo caso el es el que se burlo de mi

- si yo fuera tu le lanzaría un crucio a ese par de idiotas- la rubia no pudo evitar una risa 

- gracias a Merlin no eres yo- Samantha se llevo el vaso a la boca dando un sorbo para después levantarse de la mesa y salir de ahí, le dio un pequeño beso en la mejilla a su amiga y se retiro a paso firme, en cuanto llego a la entrada del gran comedor el rubio la miro directo a los ojos, ella solo se limito a lanzar una mirada de desprecio hacia el, dio la vuelta para marcharse 

- ¡Samantha!- la voz femenina hizo parar a la rubia en seco, girándose para mirar a esa chica

- ¿que pasa?- pregunto ella tratando de sonar lo mas calmada posible 

- quiero que me escuches- dijo la chica acercándose a ella- entre Draco y yo no hay absolutamente nada

- Astoria... no quiero sonar grosera- se llevo una mano a la mejilla- no me interesa hablar de el- Samantha dio media vuelta para irse

- tienes que escucharme- dijo la castaña haciendo que la rubia volviera para mirarla- el te ama... si es verdad me gusta, me encanta, pero el solo te quiere a ti, yo tuve la culpa de todo, no sabia que ustedes estaban juntos, por eso lo bese- Astoria tomo la mano de la rubia - tienes que hablar con el, por favor- la mirada suplicante de la castaña removió el corazón de Samantha- no lo hagas por mi... hazlo por el amor que sientes por el


Un grito desgarrador la hizo salir de sus pensamientos, inmediatamente subió las escaleras para encontrar al rubio aferrado al cuerpo de Astoria, las piernas de Samantha comenzaron a fallar y callo de rodillas, se movió como pudo para llegar hasta Draco, lo abrazo por la espalda y comenzó a sollozar

- Draco...- el rubio soltó a su mujer dejándose caer en el suelo mientras gruesas lagrimas caían de sus ojos inundando sus mejillas- lo lamento tanto...

El rubio abrazo a Samantha aferrándose a su cuerpo, ahora le demostraba que no era de acero, que también sabia llorar, que sufría como cualquier ser humano, lo que siempre evito, desmoronándose ante alguien, ahora lo estaba haciendo, se estaba rompiendo por dentro, estaba sacando todo el dolor que sentía en ese momento, el dolor de ver a la madre de su hijo muerta, a la mujer, que llego a querer, no con la misma intensidad con la que amaba a Samanta, pero si como una compañera, ahora ya no estaría mas...

Una Mirada Hacia El Pasado (Draco Malfoy )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora