Redemption.

Capitulo 2.

Louis estaba en su oficina discutiendo acaloradamente con su socio Dylan Ryden.

-El problema es que sus ideas son más innovadoras, sabes que Zac busca eso. Es un viejo cascarrabias intentando parecer joven. Este nuevo proyecto requiere algo de la última y la nueva moda. Debes saber algo de la nueva, tienes que aliarte conmigo. Somos la perfecta combinación.

-¿Señor?-lo interrumpió su secretaria. Le hizo señas de que esperara un momento.

–Lamento interrumpir pero llamó su hermano, parecía alterado.

Louis asintio.

-Zac te llamo en unos minutos.

Colgó y tomó la línea que le indicó Lizzie, su secretaria.

-¿Hola?

-¿Louis? -era Niall. Sonaba como si estuviera llorando. –Es Harry, ha tenido un accidente automovilístico. Se golpeó muy duro en la cabeza y no reacciona.

Louis se quedó congelado. ¿Qué? ¿Su Harry?

-¿Qu-que dijiste? –dijo tartamudeando.

-¡Lo que escuchaste! Debes venir ahora porque no saben si reaccionara, si tendrá un derrame o simplemente dejará de funcionar su cerebro. ¡Muévete cabeza de chorlito, tu esposo puede morir! ¿Lo recuerdas? El hombre que te espera con una sonrisa cada vez que llegas, que te hace comida y para el cual eres su maldito mundo.

-Voy para allá.

-Estamos en el hospital general.

Louis colgó aun en shock. No podía pensar claramente, no cuando su esposo estaba en peligro. ¿Cómo había sucedido? Se sintió terrible. Justamente ayer habían discutido. Y él no le pidió perdón como todas las veces pasadas. Por fin hubo un destello y las lágrimas le saltaron los ojos.

Corrió por los pasillos y encontró a toda su familia reunida. Jay lloraba descontroladamente en brazos de su padre. Rose se mantenía quieta, era su forma de demostrar su preocupación. Niall rondaba por la sala de espera, desesperado. Zayn solo lo miraba, esperando el momento en el que se derrumbara para poder atraparlo.

-Louis, -le habló su madre. Corrió a él y lo abrazó. –Oh, Louis. Lo siento tanto.

-¿Cómo está?

-Mal, mi vida. Tendrás que ser muy fuerte. Lo están operando en estos momentos. Se lastimó la cabeza y se quebró el brazo derecho. Tiene varias costillas quebradas también.

-Oh Dios, -se pasó las manos por el cabello. Nadie dijo nada más. Se sentaron a esperar el diagnóstico del doctor. Después de dos horas salió.

-¿Cómo está doctor? –dijo Louis cuando se acercó.

-Lo siento mucho Louis, no responde. No ha despertado y debo advertirte que es un mal signo. Sus costillas sanarán con el tiempo y pudimos reparar su brazo. Pero no hay nada que hacer más que esperar a que salga de su estado de coma.

-¿Coma? –dijo Louis desconsolado.

-Sí, Louis. De verdad lo lamento. El otro conductor dijo que no lo vio. Se quedó dormido.

Louis se quedó parado, siendo abrazado por su madre. No había nadamás que hacer, más que esperar.

-¿Puedo verlo? –le preguntó al doctor.

-Dentro de una hora, lo pondremos en una habitación.

-Que sea privada. -dijo Mark.

-Claro.-el doctor se marchó.