Vete a la **erda

Capítulo 5

--Mañana del día siguiente--

-Cole........ colegio........... GOLFA!.........Roger- Si, estaba hablando dormida............... de nuevo.

Entre abrí los ojos y sentí una presencia en mi habitación, creo que sabía quien era ese chico de ojos azules.

-Sal pronto de mi habitación Roger, no querrás tener problemas con tu hermana- No recibí respuesta a lo que segura respondí seco- Roger no quieres enojarme verdad?- De pronto sentí como del armario algo se movió,  esto había ido muy lejos,  y no permitiría mas.

-ROGER LARGATE DE..........- Me quede admirada, no, no, no esa no era la palabra correcta, la correcta seria, paralizada, por la hermosura del ser que tenia delante mio. Ese chico era un dios griego en persona, estaba guapísimo.

-Perdón por molestar chico, pero¡¡¡¡¡¡¿¿¿¿¿QUÉ DIABLOS ESTAS HACIENDO EN MI ARMARIO!!!!!!???????- El chico se removió y con mucho descaro, me sonrió de lado. No dios mio, un estupido, NOOO.

-Ohh, Lo siento, no tenía un lugar más cerca para esconderme, y pues, aquí me ves. Por cierto, te aconsejo no tener mas problemas, por que, hablas mucho de ello- Dijo señalando mi cama, llena de baba y peluches- Pero, te ves muy tierna. Además tienes el sueño muy pesado. Oh, me olvidaba, mi nombre es Harry Styles, soy británico y tengo un gato - Dijo extendiendo su mano a lo que yo respondí.

-Porfavor, con todo el respeto, Salte.. de.. mi.. habitación. Y mi nombre es Natalia González y soy mexicana. Ahora LARGATEEEEE.-Dicho eso me agarró la mano en un movimiento ágil se la llevó a la boca, tan solo su tacto se sintió, como en las nubes, y el beso aun mejor. En un momento desprevenido, me jalo y me besó en los labios, al principio me nege, pero después todo me valió madres, como dicen en mi país, Fueron los 5 minutos más hermosos de toda mi existencia.  Se separó de mi diciendo:

-Besas bastante bien, para ser mexicana, nos veremos otro día, Natalia González- Dicho eso se fue por mi ventana entreabierta. Ese suceso me dejo pensativa por un momento, pero saqué toda remota idea de mi cabeza. Me bañe,  luego me vestí con unos shorts arriba de la rodilla y una camisa holgada sin mangas. Baje y en ese momento Roger estaba ¿preparando el desayuno?.

Se le veía muy tierno, pero era muy ágil, Nada torpe como yo, además se le notaba una felicidad inminente en aquellos ojos azules que yo amo tanto.

Decidí no arruinar su sorpresa y salir a dar un paseo,  ya sabía por donde entrar y salir desapercibida. La ventana.

Salí y el aire fresco frotaba mis mejillas y me invitaba a seguirlo, yo en respuesta corrí sin rumbo alguno, no me importaba nada, en ese momento yo era libre. Hasta que un estúpido me sacó de mis adentros, para entrar en la cruda realidad de caer al piso.