No dejes que me rinda...

Una posible reconciliación

Tres meses antes

Hoy es un día soleado, "lindo" en palabras de otros, lamentablemente no para mí, prefiero rotundamente los días nublados, pero bueno.

Acabo de despertar gracias a que mi hermana menor llegó corriendo con una bomba de agua y me lanzó lo de tres "disparos" de agua

-¡Despierta dormilona!- gritaba mientras me rociaba- ¡Llegaremos tarde de nuevo por tu culpa!

-Ush- me quejé y tapé con la cobija mi cabeza- ¡Déjame dormir! Tengo sueño...

-Siempre el mismo cuento contigo, ¡despierta! Apenas es lunes y ya estás así...

-*Justamente porque es lunes estoy así*- pensé- Uff ya voy- suspiré y la miré fijamente- en serio, ya bajo.

Me miró amenazante- Más te vale- y salió del cuarto

Apenas lunes... Hoy será un pésimo inicio de semana

Una hora más tarde ya íbamos agarrando nuestras cosas y, como predijo mi hermana, estábamos muy tarde

12:30
Era un día muy predecible hasta el momento. Las horas pasaban; horas aburridas; mis compañeros con sus niñerías; pláticas, como siempre, incesantes con mi mejor amiga, como si no nos hubiéramos visto hace años, a pesar de haberla visto apenas dos días atrás. Sí, un día común y corriente que seguro pasaría a uno más de los días más aburridos de mi vida... Y de repente...

¡Boom!

Una invitación en el casillero de mi amiga apareció, oh, y no cualquier invitación, si hubiera sido una de esas mil y un invitaciones de los pretendientes de ella sería normal, PERO obviamente este no fue el caso:

-¿Una invitación?- preguntó muy sorprendida

-Ajá- dije sin mucha importancia

-Oh no...

-¿Qué?

-A que no adivinas de quién es...

-Mmh ¿Brandon?

-No

-William

-No

-¡Ya sé! Otra vez es Olsen. Ya dile que sí, me encanta la pareja que harían

-¡No!- reprochó casi al instante- Míralo por tu cuenta -me extendió la invitación -Y no saldré con Olsen...

-Oww, qué lástima, hasta había pensado en los nombres de sus hi~

-¡No quiero hijos, caramba! Entiéndelo... ¿Areth?

-Ohh... -dije haciendo un puchero.

-Oh, ya viste de quién es...

-¡¿Robers?! ¿¡Adeline Robers te invitó a una fiesta!?

-Lo mismo pensé yo.

-¿Cómo se le ocurre a la hipócrita?- reclamé

-¿Y yo qué sé?- un silencio, después de mucho tiempo, incómodo se formó entre nosotras -Areth...

-¿Sí?

-¿No tienes una tú?

-No...

No suelo ser cortante; odio serlo, y más con ella, pero en este momento lo único que quería era ir a mi casa y llorar por horas en mi "rincón feliz", dónde mis problemas mágicamente se hacen recuerdos de risa mientras me sumerjo en mi música.

-Hola Amy... -dijo una voz muy familiar para mí-... Hola, Areth

-Hola Addy- le llamó Amy por su apodo que casualmente se puso ella sola- gracias por la invitación, pero... ¿No le darás una a Areth?

-... -quería mucho a Amy, pero definitivamente la mataría por esto.

-De hecho- mencionó ella- por eso mismo estoy aquí... Te la vengo a entregar personalmente- sacó de su bolso (súper, no es nuevo y tampoco es "Channel") una pequeña invitación, y no es por sentirme superior, pero esta parece más arreglada- quería dártela yo misma

-Emm y... ¿Por qué?

-Porque... A ti más que a nadie te quiero en mi fiesta... -me dio la invitación -te espero -dicho esto último con ojos de cachorro a mi parecer aplastado, salió del pasillo camino a su clase con sus "mejores amigas" para nada interesadas.

-¿Yo?- me pareció muy extraño

-¡Ja! Cómo si de verdad fueras a ir a la fiesta de esta tonta... ¿Verdad?

-...

-¿Verdad que no irás?

-...

-¿¡Irás!?

-¿Viste la cara que puso? Me la dio personalmente...

-¿Recuerdas aunque sea por mínimo lo que te hizo?

-Yo creo... Qué tal vez se quiere disculpar conmigo...