Fuiste tú

¿Que diablos pasó?

Me levante por los sonoros grito de mi madre,  again,  ya esto me estaba cansando. 

Me di cuenta que no comi ayer, ni tan siquiera recibí a mis padres, pero anyways no estaba de humor, ni tampoco quería contarle nada a mis padres.

Me levanté y fui a cepillarme los dientes.  Hice mis necesidades y me bañe.  Hoy no me queje por el agua fría,  quizás me estaba acostumbrando o estoy tan down que ni siquiera noto la diferencia. 

Al salir,  me seque y me puse la toalla alrededor de mi cuerpo,  y me fui directo al armario.  Hoy...  Si que no tenía nada de ganas en vestirme,  así que solo cogí mi suéter de Batman blanco,  un Mahón negro, y mis botas,  esas nunca podían faltar.  Hoy no me quiero peinar, así que me hice una cebolla despeinada.

No!  Ni piensen que soy de esas chicas a las que le queda todo clase de peinado, y se ven Fa Bu Lo Sas.  Cuando yo  digo que es despeinada,  ess  despeinadaaa. 

Baje las escaleras con una vagancia nivel Dios,  y cogí unas Popstar, ya que sabía que no estaba el desayuno y me fui al carro. 

Ya sabía lo que iba a pasar en el carro,  mi padre me iba a investigar. 

- Vanessa,  porque ayer te fuiste a dormir y no comiste con nosotros? - y hablando del Rey de Roma y el aparece. 

- Estaba cansada papá, la Universidad me esta dando mucho trabajo, pero estoy bien, gracias por preguntar- dije mientras me ponía mis audífonos.  Sinceramente me hubiese gustado que me preguntará que me pasaba,  como estaba, o simplemente un,¿ como dormiste? ,  pero no!, el simplemente le importa esa rutina familiar de comer todos juntos.  No me malinterpreten a mi me gusta comer en familia,  pero a veces eso les importa más,  que ni se dan cuenta como nos sentimos mi hermana o yo. 

Llegamos a la Universidad,  y solo me límite a darle un beso en la mejilla y salir de allí ,  no le di ni tiempo para decirme algo,  ya que probablemente si le diera el tiempo,  me quedaré toda la hora de la primera clase ahí. 

Avance y apenas el reloj marcaba las ocho,  ya yo estaba en el Salón.  Mire,  buscando a Glenmarie, ya que en esta clase estoy con ella, y la vi concentrada en su teléfono, seguramente en Whatpadd,  ya que esta niña es un ídolo de esa aplicación,  aunque yo también.  Me senté a su lado, y no pude decir nada más, ya que entró el maestro de inglés.

Al parecer hoy sería un día diferente, ya que el maestro llegó temprano y eso sii era un gran avance,  se merecía un aplauso.

La clase estuvo aburrida,  como siempre,  daban cosas que ya yo me sabía así que me límite a ver mis redes sociales. 

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Me encontraba en la cafetería,  no puedo negar que pensaba en aquel chico tan apuesto que habíamos compartido miradas ayer, pero sinceramente no lo he visto hoy. 

Camine y camine y camine, pensando en toda mi vida, en mis problemas,  me sentía mal,  porque aunque había conocido a aquellas excelentes chicas  me sentía vacia, porque no soy de esas personas que expresan mucho sus sentimientos, no hago escándalo de que algo mal me pasa, o empiezo a llorar al frente de todo el mundo para llamar la atención,  simplemente soy de esas personas que se desahogan con si mismas, o con Val,  ella me escucha y me siento bien. 

Pase la hora pensando en todo, y sintiéndome hecha mierda,  hasta que llegó la hora de ciencia y entre. 

Estaba quedandome dormida, se los juro,  así que levante mi mano. 

- Si señorita Kurt,  que desea? - dijo el maestro de ciencias con el seño fruncido

- maestro, yo entiendo que acabó de llegar de la hora de almuerzo, pero usted me puede dejar ir al baño? - y intente poner mi mejor sonrisa para comvercerlo

- si,  Kurt puedes ir, pero date prisa- no puedo creer que me dejo ir,  así que me fui de prisa para ir al baño

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Cuando salí del baño,  tenia dos opciones,  o subir por la escalera que estaba en frente de mi,  o subir por una un poco más abajo pero más directa al Salón donde me correspondía,  así que me fui por las escaleras de más abajo.  Gran error.....

Y ahí fue cuando lo vi sentado relajando con sus amigos,  tenia una sonrisa hermosa, su sonrisa te contagiaba con tan solo verlo, era tan....  VANESSAAAA PARA! 

Me puse mis audífonos y empece a subir las escaleras y fue ahí cuando sentí una mano aguantar la mía, que me dio un corrientaso...  Y cuando me vire no pude creer lo que mis ojos estaban viendo. 

- Hola chica, como te llamas??- me dijo mientras su sonrisa se reflejaba una vez más,  pero esta sonrisa era diferente,  era..  Tímida? Pfff claro que no. 

- Vv aa nessa-apenas pude decir mi nombre sin caer al piso desmayada, no sabía que me pasaba, estaba súper mega nerviosa, estaba temblando y sudando a la vez. 

- Vanessa...  Que? - y me miro atento, mientras yo me daba puños mentalmente

- Vanessa Kurt- dije esta vez un poco más segura

- Krutz?? - dijo mientras me hizo reír con su ocurrencia

- No,  Kurt- y sin más antes de que me de un ataque,  seguí subiendo las escaleras y lo deje con la palabra en la boca. 

Entre al Salón, y me senté. 

¿¿Que Diablos paso?? En serio yo lo deje con la palabra en la boca?  Agh, me deben dar un puño. 

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Pase todo el día pensando en que Diablos había pasado,  toda la clase de matemáticas, hasta todo el camino a casa.  Entre y cerré la puerta tras de mi.  Tenia que disimular cuando vea a Val, ya que mi hermana se da cuenta de todo,  no se ni como lo hace.

Entonces me puse a cocinar, arroz con jamonilla guisa, mientras unos brazos se cruzaron con los míos. 

- Hola, Van van,  que cocinas?? - me dijo mientras depósito un beso en mi mejilla

- Arroz con jamonilla guisa,  Val- dije mientras apartaba la mirada de ella para que no se diera cuenta por mis ojos,  ya que mis ojos siempre me  delatan con ella. 

- Que tienes Van? - yyy aquí empezó el cuestionario,  ya sabía yo que ella lo iba a notar,  era muy obvio que estaba confundida, que no entendía nada, pero estaba fockinmente feliz. 

- Nada Val,  estoy bien- me miro con el seño fruncido con una mirada matadora, mientras alzaba sus cejas. 

- Bien,  te contaré,  pero no le digas a mama ni a papa,  vale? - que puedo decir?  Su cara me venció, daba mucho miedo. Luego ella asintió y se sentó a mi lado,  en lo que yo dejaba todo bien en la cocina y me sentaba al lado de ella. 

- Mira Val,  ese chico que te Conte la otra vez, hoy me pregunto mi nombre mientras iba subiendo las escaleras para ir al salón de Ciencias.  No puedo negar que un nerviosismo entro en mi,  y por poco me desmayo porque sinceramente el chico es guapo.  Pero no se que diablos paso?  Y si fue una apuesta?  Y si solo quiere jugar conmigo?  Tengo miedo Val,  porque nunca había sentido algo así con mis dos novios anteriores, y no entiendo porque con el sí- decía mientras negaba una y otra vez. 

- Van van,  te dije que no puedes tener miedo.  Entiendo todas tus interrogantes,  pero ahora digo yo.  Y si ese es el indicado?  Y si ese es el que te hace creer en el amor de nuevo?  Y si ese es diferente a los demás?  Tu no sabes.  Obviamente con el miedo ese que tienes, nunca lo sabrás.  Yo siempre estaré aqui por si algo sale mal, pero no puedes dejar vencerte tan fácil,  esa no es la Vanessa que yo conozco- me dijo mientras me abrazaba. 

Ella tenia razón, yo no era así de sensible, no era de temerle a nadie, nunca tuve mi autoestima por el piso,  hasta que supe que era tener un corazón roto.... 

Mama llegó con papa en ese momento,  y nos sentamos a comer,  luego me despedí de ellos y me fui a duchar para luego quedarme dormida rápidamente. 

Tenia mucho que pensar,  pero estaba demasiado cansada, mañana será un nuevo día,  tal vez si le de una oportunidad....  Si es que se me vuelve a acercar...