La Fiesta

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Hoy mi día estuvo re agotador. Ya que estaba sola en casa, me puse a estudiar de principio a fin el libreto que la maestra nos dió.  Mañana es la competencia y estoy extramadamente nerviosa. No se si es por el nerviosismo pero últimamente me siento algo mariada y como si mis venas estuvieran comiendome por dentro, la verdad que duele mucho pero no le doy tanta importancia.

Orita me pese y noté que estoy bajo peso.  Antes pesaba 90 libras, ahora estoy en las 76... Creo que fue acasua de la mini depresión que me dió la semana pasada, pero hoy no he comido por el estrés de la competencia,  la verdad estoy muy nerviosa.

Después de terminar de estudiar, llegó mi hermanita de la escuela y insistió en ayudarme a escoger el traje para ésta noche.  La verdad no estoy muy emocionada pero mis mejores amigos van,  así que no creo que pase nada malo. Se decidió por un traje color navy. No les puedo mentir me mató ese traje, quede enamorada totalmente. 

Y aquí estoy...  Terminando de maquillarme. La fiesta es a las 8, así que estoy a tiempo, son las 7: 30. Si, me prepare un poco más temprano,  ya que a Elías se le olvidó decirme a que hora me venia a buscar. 

Baje las escaleras como si fuera una princesa. Tomaba la varanda con mi mano derecha y bajaba despacio.  Se sentía realmente bien,  aunque sabía que nadie estaría esperandome abajo,  lo hacía solo porque quería.  Saben?  A veces las princesas de las películas son solo éso, de películas...  A veces creemos que todos los cuentos tienen un final feliz, o que no vamos a salir lastimadas pero la verdad es otra,  a veces ni tan siquiera pensamos en como actuamos en el momento y sólo actuamos por amor... a ciegas, pero quien nos puede culpar?  No todas somos iguales, no todas somos valientes, no todas hablámos por nosotras mismas... 

Estaba metida en mis pesamientos, hasta que una voz me interrumpió, y fue cuando me di cuenta que me había quedado a mitad de las escaleras...

--Al fin bajas Vany, estuve aquí desde las siete esperándote-- me dijo Elías con su sonrisa encantadora.  No me culpen, que él haya hecho todo mierda no significa que le quite lo lindo,  ok?

-- Nunca me dijiste a que hora me venías a buscar, y pues no sabía a que hora bañarme-- le dije alzando los hombros restándole importancia.  La verdad es que yo ni iba a hablar con él, pero bueno no se ni como entró. Cuando le iba a preguntar, me interrumpió.

-- Te ves hermosa Vanessa-- me dijo mirándome a los ojos.

Okay???  Está enfermo o que?  No se que está pasando pero okay. 

-- Gracias, tu igual-- le dije dándole una leve sonrisa-- ¿como entraste? -- la curiosidad me mataba.

-- Extraño tu sonrisa, ésa que era verdadera como si estuvieras viendo lo mejor de tu vida-- me dijo bajando la cabeza. 

No sabía que decirle, la verdad era que hace tiempo no reía así solo con mi hermanita, y con éso bastaba. Cuando vio que no sabía que contestar me abrió la puerta de mi casa, y salí.  Vi su mustang viejo, color blanco. Hermoso.  Es de los viejos pero la verdad me encantan. Me dirigía hacia el auto, hasta que sentí que me agarraban la muñeca. 

-- Vanessa,  estás bien? Es que te veo más flaca,  segura que estas bien? -- no sabía porque insistía tanto,  estaba bien,  un poco mareada pero bien.

-- Estoy bien Elías, tranquilo,  de acuerdo? --

-- Está bien.  Oye quería decirte perdón,  perdón por toda la mierda que te hice. Tu tu no merecías nada de eso,  tu vales mucho Vanessa, y yo solo heche a perder lo mejor que yo tenía. -- me dijo mirándome a los ojos, para luego bajar la cabeza. 

La verdad era que yo ya lo estaba "superando", aunque pasara lo que pasara jamás me iba a arrepentir de haberlo conocido.  Algunas me dirán idiota o cosas peores, pero como ya dije, cada una somos diferentes y reaccionamos de manera distinta, simplemente no juzguen si no han pasado por lo mismo, y si no piensan igual que yo.

-- Duele todavía, pero no te preocupes, nos vamos si? -- el al parecer entendió que no quería hablar del tema, así que solo asintió, me abrió la puerta de su auto, se montó, y nos fuimos. 

El camino fue algo largo, fueron como 40 minutos. No hablamos, pero nos mirábamos par de veces. El silencio fue muy cómodo, era tal y como lo recordaba. A cada rato me pasaba mirando por la ventana, y todo lo que había eran hermosos árboles. Estaba relajada, la verdad más que relajada,  estaba en paz, no oia peleas, ni estudiaba, ni trabajos,  sólo yo y la hermosa vista que tenía.

Estaba metida en mis pensamientos cuando vi que el auto paró.  Estábamos al frente de una casa de dos pisos, era de un color gris clarito, hermoso. Estaba repleta de estudiantes y la verdad era que ni sabía de quien era.  Al entrar me quedé impactada, la música retumbaba en mis oídos. Las luces estaban apagadas y lo único que brillaba era la una bola gris en el medio que reflejaba luces por todo el lugar. La verdad era que la fiesta tenia que ser popular.

-- Ésta fiesta se hace todos los años, decidieron que en vez de una baile de primavera, hacer una fiesta en la casa de unos de los estudiantes más populares y éste año es John McCain, lo debes haber visto por ahí-- me dijo Elías prácticamente gritando por la música.

La verdad era que si había escuchado de El,pero no se porque las chicas mueren por él, porque es el tipo más feo que he visto,  pero bueno, no importa la casa esta deslumbrante.

Lo raro de todo ésto es que no he visto a Glenmarie, ni a Tom aquí y se supone que estén aquí, pero bueno los regañare después. 

-- Oye Vany  quieres bailar? -- me dijo Elías con un brillo en los ojos que hace mucho no había visto. 

Lo hago o no lo hago?  Si no lo hago me quedaré aquí como una estúpida y si lo hago pues seguramente me divertire, así que creo que. ..

-- De acuerdo,  solo una -- le dije estirando mi mano. 

Me tomo de la mano,  y me acercó a la área donde estaban bailando.  Me tomó de la cintura y me acercó hacia él, y comenzamos a bailar.  Estábamos  relajando, ambos no sabíamos bailar pero lo hacíamos como podíamos. Estaba entretenida mirándolo hasta que... 

-- Elías que haces con ella? -- una voz que me irritaba la vida, retumbó en mis oídos. 

El se volteo para atrás y la miro serio.

-- Que quieres Adamaris? -- le dijo con un tono cortante

-- Como que que quiero? A caso no ves que yo quiero estar contigo y estas detrás de ella? --

-- Adamaris basta, deja el show y vete-- le dijo Elías. 

Yo estoy en estado de shock,  o sea no entiendo nada de esto.

-- Deja de mirarme Vanessa-- me dijo ella, por primera vez en la historia creo que ella me dice mi nombre de verdad.

Estuve a punto de contestarle,  hasta que Elías me interrumpió. 

Pero que es? La gente no me va a dejar hablar hoy y caminar en paz?

-- Adamaris dejala en paz, no la metas en esto. -- habló Elías

-- Agh,  de acuerdo como quieras, adiós-- y sin más se fue, sin mirar atrás. 

-- Perdón por éso, la verdad no entiendo su show, pero estamos tu y yo nada más de acuerdo? -- me dijo Elías tomandome de la mejilla.  Solamente me límite a asentir y a sonreile. 

-- Elías, creo creo que me siento mal-- le dije y la verdad era que los mareos están aumentando y estoy empezando a ver todo negro.  No se que me pasa pero quiero ir a casa.

Creo creo que tomaré una siesta, y en ese momento cerré mis ojos y no me acuerdo de lo que pasó.





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