Simplemente describía aquel cliché: «sabes que te vas a estrellar y aceleras»
Sabía en el lío que me estaba metiendo, cada vez caía aun más profundo en su alma. Es todo lo que dije no querer tener y ahora tengo y es todo lo que quiero. Cada imperfección, cada defecto, cada diferencia que tiene conmigo, termino aceptandola, como si el estuviese primero que todo. ¿Como mierda terminó gustandome tanto? ¿En que momento empecé a querer cada defecto de su ser? ¿cuando comencé a caer en su calurosa, peligrosa y hermosa alma?
Ahora solo se, que me estoy enamorando de su oscuridad, llevandome a mí, hacia la paz de su característica guerra y el quizá viniendo hacia la guerra, de mi infinita paz.
Ahora solo tengo miedo, de empezar a amar aquello que mi tranquilidad quitará, pero es el mismo miedo el que me llena de ansias y desespero de llegar hasta el final del tunel, con su mano protectora sobre la mía.
Nos encontramos sin querer buscarnos. Y ahora nos buscamos para morir el uno por el otro, y asi cada día seguir encontrándonos.
