Amanecí con unas ansias locas de verte y platicarte como me fue durante mi sueño, amanecí con la imagen de tu cara en mis ojos, con el sabor de tus labios en los míos y la suavidad de tus manos en mi cuerpo, amanecí sin tí, pero a la vez contigo, porque eres mi realidad, porque en ti encontré lo que en nadie más, porque me haz enseñado cosas que ni yo sabía que existían, porque de tí aprendí que la ausencia también es presencia, porque me di cuenta, qué ni yo, soy tuya, ni tú, eres mío, sólo somos dos locos jugando a enamorarnos con besos, palabras y caricias mutuas...