Capítulo 7: Carlota, la fantástica y maravillosa Carlota (2ª parte)

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Carlota y yo éramos muy amigos, amigos inseparables, como hermanos, de esos que no se iban a separar nunca. Rubén y Juan estaban juntos pero Rubén tenía muy poca paciencia con él.

Un 27 de octubre del 97 quedamos los cuatro en casa de los hermanos y estuvimos toda la tarde jugando con la Nintendo 86. Como de costumbre por la noche, mientras mi madre no estaba en casa, claro, me conecte al AltaVista y estuve hablando con Carlota, ella ni corta ni perezosa se me declaró por vía internet, yo me quedé patidifuso y claramente yo también la confesé mis sentimientos.

Carlota y yo decidimos ser novios así que el día siguiente quedamos la pandilla en mi casa, mientras estaba en el salón con su Nintendo, Carlota y yo estábamos cocinando en la cocina, también se vino Rubén y nos cortó todo el rollo.

Besé a Carlota antes de que viniera Rubén, repito, besé a Carlota, fue un beso mágico.

El 29 de octubre del 97 recibí un mensaje en AltaVista a las 16:29 que decía que ella misma se había equivocado de sentimientos, yo la gustaba de acuerdo, pero además la gustaba otra persona y quería que siguiésemos siendo amigos.

En ese momento apague la computadora y pensaba que no la iba a encender jamás.

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