Aprendiendo a ser romántico |Louis Tomlinson|

Cap. 31

Silencio.

Era todo lo que reinaba en el pequeño jardín mientras miraba a Louis sin poder creer sus palabras.

Las ideas de arremolinaban en mi mente junto con todo un mar de emociones que sacudían mi cuerpo al punto de que creía que iba a gritar de emoción.

Los recuerdos también se atropellaban en mi mente mientras intentaba procesar lo que Louis había pronunciado.

Había pasado días y noches enteras imaginando este momento, pensando en como se sentiría que Louis me hiciera esa pregunta, como reaccionaria aunque ya tuviera la respuesta en la punta de la lengua sin siquiera pensarlo.

También me venían a la mente los días en que lo admiraba en secreto, como toda una chica completa y perdidamente enamorada del mejor amigo de su hermano, algo como un amor platónico, un imposible.

Los días en que lo había visto entrenar, fingiendo que acompañaba a Perrie para ver a Zayn. O cuando se metía a la biblioteca para estudiar para un examen, y como pasaba horas y horas por no haber estudiado con anticipación.

Y era ahí cuando me preguntaba si esto era real. Louis llevaba siendo mi amor platónico desde mucho tiempo atrás, me había pasado admirándolo y queriéndolo durante mucho tiempo en secreto que ahora que todo se estaba tornando realidad, no podía creérmelo.

Miré a Louis de cabeza a pies para después volver a encontrarme con su mirada color azul. Se mordía el labio inferior con fuerza mientras me miraba expectante.

Quería responder y gritar un sí pero sentía un extraño nudo en la garganta. La emoción seguía recorriéndome y en este punto ya me sentía incapaz de hablar.

Perrie lo había dicho: "No tarda en preguntártelo, son prácticamente una pareja" pero no había querido creérmelo aunque yo notara todos esos gestos lindos, aunque yo fuera participe de besos fugaces y significativos. Simplemente aún no podía creer que estuviese pasando.

¿Mi amor platónico pidiéndome ser su novia? Era peor que esas películas donde el popular se enamoraba de la nerd de la noche a la mañana. Debía ser yo alguien con muchísima suerte para que eso sucediera.

Escuché a Zayn aclararse la garganta con clara incomodidad, recordarme su presencia, la de Perrie y la de Niall. Teníamos público, lo que lo hacía un tanto bochornoso.

Louis se rascó la nunca y movió el pie con clara impaciencia. Si el hubiese esperado lo que yo había esperado este momento, no sería tan impaciente.

-Y-yo entendería si tú...-comenzó a decir Louis con la voz levemente ronca mientras me miraba un tanto triste.

Sus ojos habían pasado de ser brillantes a ser oscuros y sin ánimo alguno. Era obvio que esperaba el sí de forma inmediata.

Lo miré entrecerrando los ojos y luego tomé aire. Quería responderle pero dentro de mí había toda una mezcla de emoción que sentía que si abría la boca, gritaría y me vería como una loca.

-Sí-murmuré intentando calmar la emoción acumulada en mi estómago mientras intentaba no gritar.

Louis abrió mucho los ojos y pestañeó repetidas veces mientras su boca se abría levemente. Escuché a Niall soltar una carcajada y yo tuve que reprimir una mía, Louis se veía completamente adorable.

-¿Qué has dicho?-preguntó incrédulo mientras se acercaba a mí.

¿Qué no esperaba el sí? Creí que era más que notorio que Louis traía mi mundo de cabeza.

Perrie y Niall me lo habían dicho, mi amor por Louis podía notarse a kilómetros, cualquiera que me viera observándolo, sabría que me gustaba y mucho. Incluso se notaba por la forma de comportarme cuando él estaba cerca, sin darme cuenta siempre quería llamar su atención y escucharlo hablar hasta casarme de su melodiosa voz, cosa que estoy segura que jamás pasaría porque amaba escucharlo hablar.