Hookah

2.1K 311 75
                                    

Creo que le estaré agradecido eternamente a Jin, deberé ponerle un monumento o proclamar el día mundial de alabemos a Kim Seok Jin. Mí ahora mejor amigo, había invitado a Hoseok y Jungkook a nuestra fogata, por lo que los 4 caminamos hasta llegar a dónde Nam. Tae y los demás se encontraban ahí también o eso pensé porque nada más llegar me di cuenta que Suga y Tae no estaban. Zico nos dijo que habían ido al carro de Dean por más bebidas pues estaban por acabarse.

Después de hacer las presentaciones debidas, entre el creciente grupo, nos sentamos a conversar, aunque las conversaciones eran variadas no presté mucha atención a ellas ¿cómo hacerlo si tenía a Jungkook sentado junto a mí? Incluso respirar se me hacía difícil, más de una vez me atrapó mirándolo de reojo.

Suga y Tae no tardaron en reunirse con nosotros, la cara de mi amigo al ver a los nuevos intrusos fue un verdadero poema. Primero vio a Jungkook y luego a mí, la expresión en su rostro era de pura emoción, no lo había visto así desde la vez que se enteró que había sido aceptado en la universidad. Negué levemente y le hice una seña para que se callara, no quería que fuera a decir algo fuera de lugar, pareció comprender y relajó su expresión, después ayudó a Suga a dejar las bebidas cerca de todos nosotros. Sólo entonces vio a Hoseok y todo se volvió gritos efusivos.

Tras llegar el alcohol todos bebimos, Tae y Hoseok se estaban poniendo al día y de vez en vez nos dirigían miradas cómplices a Jungkook y a mí, ya que nos habíamos quedado solos. Pues Nam y Jin estaban besándose a unos metros lejos de nosotros, los otros seis estaban en su propio mundo, bailando, besándose incluso dos de ellos desaparecieron. Ni idea en que momento ocurrió.

-¿así que... desde cuándo conoces a Hoseok? - me animé a preguntarle a Jungkook, sólo esperaba no fuera una forma lamentable de romper el hielo.

-El pasado fin de semana, él estaba dando un curso en mi universidad.

-Típico, no se le ha quitado esa esencia de maestro. En la preparatoria era el líder del club de danza, fue bastante triste cuando tuvo que graduarse.

-También lo fue cuando tú te graduaste. - dijo de lo más normal para luego darle un trago a su botella de soju.

-¿yo?¿a qué te refieres? -pregunté desconcertado, atreviéndome a mirarlo justo a los ojos, los cuales se achicaron un poco cuando en respuesta él sonrió. Jodida sonrisa la suya, había olvidado lo mucho que me gustaban sus expresiones.

-A decir verdad, siempre esperaba que el club de danza hiciera presentaciones en la escuela, bailabas jodidamente bien, de todos me gustaba mirarte a ti. Así que cuando te graduaste el club pareció haber perdido... la gracia. - el tercer, era el tercer paro cardiaco que me daba esta noche. - Justo antes, no pude evitar sentirme celoso cuando te vi bailar con aquel chico junto a la fogata.

-Bu-bueno, yo...- Calor, calor en toda mi cara y no era culpa de la fogata. Lo que acababa de decir Jungkook me había dejado sin habla.

-¿De qué hablan ustedes dos?­­- interrumpió Taehyung, quien acababa de recuperar su puesto de mejor amigo.

-De que Jimin baila excelente. - respondió Jungkook mientras me miraba, yo sólo atine a bajar la mirada mientras reía avergonzado.

-Yo siempre lo he dicho, ¿no es cierto? - ese era Hoseok que junto con Tae se acomodaron junto con nosotros.

-Bueno es que tuve un excelente maestro. -respondí, Jungkook interrumpió el darle un trago a su botella y desvió su mirada mientras empujaba el interior de su mejilla con la lengua.

-Y yo un excelente alumno. - dijo Hoseok.

-Jungkook, me comentó Hoseok que se conocieron en la universidad ¿qué tal te va en ella? ¿Recién entraste no es así? - le preguntó Tae a Jungkook rompiendo el momento maestro-alumno.

Me gustabas {Kookmin}Onde histórias criam vida. Descubra agora