VERDADES

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No sabía cómo enfrentar la decisión que estaba a punto de tomar.

—Hola bebé — me saludó Kathy, estaba lista para irnos a la universidad.

— Deja en paz a Valentina, te dije que no fue culpa de su padre.

— Sí es su culpa — gritó, cogió su bolso marrón y lo tiró con furia en la cama— su padre le quitó la empresa al mío y para colmo se robó a mi novio. La odio Josh.

El repentino enojo de mi hermanastra no era por la empresa, sino por orgullo. Hace dos años que nos conocimos en la boda de nuestros padres, yo había perdido a muy temprana edad a mi padre y aunque quisiera recordarlo no puedo, mientras que Kathy nunca menciona a su madre.

El que apareciera un chico en su vida hizo que cambiara un poco sus hábitos, pero no quitaba lo muy celosa y controladora que podía llegar a ser. Aprendí a conocerla estos dos años.

— A ti no te gustaba ese chico — respondí.

— Sí me gustaba, era lindo — sonrió

— ¿Lo querías?

— No — hizo un gesto de disgusto — además en cuanto me aburriera lo iba a dejar.

— Pero entonces por qué te molesta que esté con Valentina, no lo entiendo.

— Porque me lo quitó.

Sabía que no iba a llegar a nada con esta conversación, como también que estaba dispuesta a lastimarla y no podía permitirlo.

Cogí mi teléfono y salí a toda prisa de la casa. Había recordado que tenía entre mis contactos el número del padre de Valentina, lo conseguí en una de las citas que tuvimos.

Marqué rápidamente el número, no quería arrepentirme.

Una timbrada...
Dos timbradas...

— ¿Aló?

— Buenas tardes señor, habla Josh. Necesito hablar personalmente con usted, es de urgencia.

Sueños Enredados (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora