Querido Romeo, no soy tu Julieta

capitulo 2

                                                                           2

Lucy ¿Dónde estás? Olvidaste que quedamos en comer juntos – me sorprendí algo al escucharlo, ¡no lo puedo creer!, lo había olvidado por completo.

Perdóname Erik, pero ya voy, estoy en camino –dije mientras me dirigía donde estaba mi mochila, y me la coloqué en el hombro.

Más te vale pequeña –dijo Erik antes de colgar.

-guarde mi celular en mi mochila y voltee a ver a Arturo- me tengo que ir –realmente no quería irme, quería terminar con lo que apenas estábamos empezando...

¿vas a ir a ver al chico que te gusta? –pregunto Arturo algo ¿celos? Malditos celos de hermanos, pero, celos son celos, tan siquiera le intereso un poco.

-me acerque a él y rodee su cuello con mis brazos- ¿acaso estas celoso? –pregunta con una sonrisa coqueta.

Tu solo eres mía –rodeo mi cintura con sus brazos y me beso apasionadamente, yo correspondí a aquel beso rápidamente, extrañaba besarlo...

-después de unos pocos minutos me separe un poco de él y coloque mi dedo índice por encima de sus labios- yo solamente seré tuya si tú eres solamente mío –él me junto más a él para luego besarme.

Trato hecho –dio mientras me miraba, ¿en serio el acepto?

Muy bien, pero por ahora me tengo que ir –dije mientras me separaba de él- nos vemos en la tarde –le guiñe un ojo y Salí del salón de clases.

P.V Arturo.

-me senté encima del escritorio- no estoy para juegos –dije mientras me revolvía el cabello- no lo puedo creer – reí levemente- no debería estar pasando nada de esto, mucho menos con ella...

P.V Lucy.

Erik!! – me lance a los brazos de aquel chico pelinegro- perdón por hacerte esperar tanto.

-él solo comenzó a reír- no te preocupes pequeña, lo importante es que ya estás aquí- después de decir aquello me dedico una hermosa sonrisa.

Maldito, eres muy guapo –dije sonriendo.

Y tu muy hermosa señorita Capuleto –dijo Erik mientras sus mejillas tomaban un leve color rojo.

Gracias, y dime, ¿te vas a quedar a vivir en la ciudad? –pregunte curiosa.

Claro pequeña, no esperamos 10 años para regresar, eh irme rápidamente – dijo Erik mientras acariciaba mi mejilla. Erik es mi mejor amigo desde que yo era una bebé, él se tuvo que ir de viaje con sus padres desde que tenía 9 años y yo 7, siempre estuvimos en contacto, y gracias a eso, sabe TODO de mí.

Más te vale –hice un puchero para luego sonreír.

Sigues siendo como una niña pequeña, señorita Capuleto –dijo él con una sonrisa en sus labios- aunque –me observo de pies a cabeza- ya tienes cuerpo de mujer.

-reí mientras negaba con mi cabeza- en 10 años tuve que cambiar algo, señorito, yo solo soy infantil de vez en cuando, y casi siempre es contigo –dije sonriendo- además –también lo mire de pies a cabeza- tú también ya tienes cuerpo de hombre maduro.

Soy un hombre maduro Lucy, te recuerdo que tengo 19 años –dijo para después tomarme de la cintura y juntarme a él.

-reí nerviosamente- perdón viejito, pero te recuerdo que yo también voy a ser mayor de edad en menos de un mes.

-me junto más a su cuerpo, podía sentir como sus labios rosaban levemente los míos- sí, ya te podrás casar conmigo –digo él y fue ahí donde corto toda distancia que había entre sus labios y los míos.

Erik!!, deja de tus juegos, yo no quiero ser una más en tu lista de chicas –dije separándome de él.

-él me junto nuevamente a él, y me beso, al principio no le correspondí, pero después de unos segundos seguí con aquel beso, besaba diferente que Arturo, pero aun así me hacía sentir cosas ¿Por qué estoy continuando el beso de mi mejor amigo si estoy enamorada de alguien más? Erik me había dicho que me ayudaría a superar a Arturo, es un plan que Erik tiene, para él un beso no es nada, ¿Erik es virgen? Ha! Para nada, él es un completo playboy, para él siembre va a ser ¨un amor de una noche¨ en pocas palabras él no quiere nada formal con alguien, solo quiere sexo ¿yo soy virgen? Sí, yo me entregare al hombre que amo, si, espero que mi primera vez sea con Arturo... ¿imposible? Lo creía hasta el día de hoy- tu nunca ceras como las demás chicas, tu eres diferente.

-yo solamente pude sonreír- a cuantas chicas les has dicho eso –dije antes de soltar una carcajada.

-coloco su mano izquierda sobre mi mejilla derecha y la comenzó a acariciar delicadamente mientras me sonreía con dulzura- sabes que solo soy lindo contigo mi querida Lucy – después de decir eso nuevamente me beso.

-lo separe un poco de mí, mire hacia otra parte apenada- Erik, no puedo, sé que lo haces para ayudarme para superar a Arturo... pero estas yendo demasiado rápido.

- Erik se separó de mí y coloco sus manos dentro de sus bolsillos de su pantalón- está bien, no quería forzarte a nada.

Gracias –dije empezando a caminar hacia un local de helados- ¿vamos por helados de galleta? – volteé a verlo, él solo asintió con la cabeza y comenzó a caminar a un lado mío.

-después de un tiempo, después de acabarnos nuestros helados y que unas chicas secuestraran a Erik me estaba dirigiendo hacia mi casa caminado-

¿No quieres que te lleve a tu casa? –preguntó un chico desde su carro, ya estaba harta de escuchar a los chicos decirme eso.

¿y si mejor te vas al infierno? –pregunté volteando a ver quién era el chico- p..perdón –dije apenada, en que estaba pensando?

-se muerde el labio inferior- ¿y si nos vamos juntos? –preguntó Arturo con una de sus hermosas y sexis sonrisas.

-le sonreí coquetamente- me encanta la idea.

- el comenzó a reír levemente, dios, todo de él es perfecto- ¿entonces, si quieres que te lleve a tu casa?

Se feliz que no te puedo negar nada –dije mientras me acercaba al auto.

P.D Erik

-me encontraba en la casa de una chica que ni conozco, nos estábamos besando, realmente ni se su nombre, desde hace 3 años soy de esta manera, ¿Por qué? Lo hago por despecho realmente, porque a la única mujer que amo está enamorada de un hombre que solo juega con ella, yo he querido ayudarla, pero ella no me entiende... ella está enamorada, la quiero olvidar, he intentado de todo, pero no puedo hacerlo, desde niños estoy enamorado de ella... de mi querida Lucy... mi mejor amiga...

PV Lucy.

Gracias –le dije a Arturo cuando estábamos frente de mi casa- me quite el cinturón de seguridad para después tomar mi mochila, iba a salir del auto cuando Arturo toma mi mano, solo voltee a verlo algo confundida.

¿fuiste a ver al chico que te gusta? –pregunto Arturo viéndome algo ¿triste? Junto con algo de ¿celos? ¿Qué diablos es lo que está pasando aquí?