Querido Romeo, no soy tu Julieta

capitulo 3

                                              Cap 3.

Arturo... ¿estas celoso? –pregunte mirándolo a los ojos, a pesar de todo se ve tan guapo.

-acerco su rostro al mío y me beso- más de lo que te imaginas – dije viéndolo a los ojos.

-lo mire, todo de él es tan perfecto, lo amo, cada vez lo amo más, si, yo creí que eso no era posible, pero, siempre encuentra la manera, solo él puede hacerme sentir de esa manera- Arturo... tu, que sientes por mí? –pregunte viéndolo a los ojos, él ya estaba a punto de contestar a aquella pregunta, pero de la nada comenzó a sonar su celular, lo busco en uno de sus bolsillos y contesto aquella llamada...

Hola cariño –contesto Arturo, yo solo baje del auto dejando la puerta abierta sin hacer ningún ruido y me metí a mi casa, rápidamente subí las escaleras, y me encere en mi habitación, de la nada sentí húmeda mis mejillas...¨hola cariño¨...

Soy una tonta, si, lo admito, estaba esperando a que me respondiera con un ¨te amo Lucy Elizabeth, te amo desde la primera vez que te vi¨, sí, eso esperaba –me senté sobre el sofá que estaba enfrente de la ventana y abrace mis piernas, tonta...él ya tiene a alguien quien amar...

-después de un tiempo escuche que alguien estaba tocando la puerta, me había quedado dormida, me levente del sofá para luego dirigirme a la puerta y abrirla- oh, hola mamá.

Mi niña, va a venir la familia Montesco en pocos minutos para cenar –me informo.

Oh, está bien, solo deja me baño para bajar –dije cerrando la puerta, fui al baño y abrí la llave de la regadera, espere un poco de tiempo para quitarme la ropa para luego dejar que las gotas tibias cayeran por mi cuerpo... tanta tranquilidad me dejaba pensar... pero en lo único que puedo pensar es en él, en Arturo... después de terminar de bañarme salí de la regadera para luego cubrir mi cuerpo con una toalla, salí del baño para luego ir al armario, me coloque un vestido pegado al cuerpo color negro, me coloque unos tacones color crema y un maquillaje natural, deje mi cabello suelto, mi color de cabello es rubio con unas mechas rubias obscuras, cafés, y algunas negras, me llega el cabello un poco arriba de la cintura- sonríe –me dije a mi misma cuando me vi en el espejo, decidí dejar mi habitación y bajar por las escalaras, pude ver a Arturo tomando por la cintura a mi hermana Sara.

Woow!, te vez realmente bien Lucy –dijo mi hermana con una linda sonrisa... mi hermana tiene 23 años, cabello rubio, ojos verdes, su cabello le llegaba un poco más debajo de los hombros.

Gracias –intente sonreír-

Bueno chicos, y apoden pasar al comedor –dijo mi mamá, haciendo que fuera con ella.

¿y quién es esta hermosa jovencita? –al escuchar esa voz no pude evitar sonreír, eran los padres de Arturo y Erik, fui rápidamente con Gonzalo y lo abracé.

Cuanto los extrañé tío –dije abrazándolo.

Dios mío Lucy, estas hermosa – deje de abrazar a Gonzalo y abrace a Paty la esposa de Gonzalo, después de un tiempo me separe de ella.

Yo solo supe que había venido Erik, que grata sorpresa –sonreí con alegría- luego lo matare porque no me dijo nada de esto.

No, nada de matarme, ellos me dijeron que no te dijera nada –dijo Erik entrando al comedor.

¿Quién quiere matar a quién? –pregunto Arturo llegando junto a mi hermana.

Yo tengo entendido que... ¿Lucy? Quiere matar a nuestro hermano por no haberle dicho no sé qué cosa –dijo un chico de cabello castaño claro, como el de Arturo y ojos azules como los de Erik ¿desde cuándo ese chico estaba aquí?

Lucy Elizabeth Capuleto – dije viendo a aquel chico algo confundida.

¡¿Elí?! –dijo aquel chico casi gritando mientras se paraba de su asiento y analizaba cada parte de mi cuerpo.

¿podrías dejar de mirarme? Pervertido –dije poniendo una mano en mi cintura.

-aquel chico sonrío- sigues con tu mismo carácter –me guiño un ojo- sigues siendo igual de hermosa Elí –dijo aquel chico tomándome de la mano.

-al verlo más de cerca me sorprendí- ¿Dylan?

¡Por fin se rencuentran los tortolitos!!!! – dijo mi hermano mientras entraba al comedor.

Cállate David –dije mientras quitaba mi mano de la mano de Dylan.

-después de un tiempo de charlar todos nos sentamos a cenar, a mi lado izquierdo estaba Erik y a mi lado derecho estaba Dylan, frente mío estaba Arturo... con mi hermana, me sentía extraña, creo que es la primera vez que veo a toda la familia Montesco reunida, conozco a Erik y a Dylan desde que era bebé, un año antes de que se fuera Erik y sus papás, se fue Dylan a un internado, él decidió irse, oh eso es lo que me dijeron, a los años mi hermano trajo a su mejor amigo a la casa, resulto ser un Montesco, él vivía con su abuela.

-De la nada fui interrumpida de mis pensamientos por la voz de Gonzalo-

Aparte de habernos reunidos aquí por nuestra llegada, fue por varias razones más, ¿no es cierto hijo? –miro a Arturo.

-Arturo aclaro la garganta- sí, una de esas es que, Sara y yo –miro a mi hermana para luego mirarme a mí- queremos ser publica nuestra relación.

No, no, no... díganme que sigo dormida, que esto es una pesadilla, que él no está enamorado de mi hermana, que él me ama a mí, él... me utilizo, lo sabía, sabía que solo era un jugete.

¿y cuáles son las otras razones? –preguntó Erik.

Mi mamá y Paty se vieron entre si y se pararon se su asiento- la otra es que... queremos que la familia Montesco y Capuleto se junte.

¿y eso significa? –dijo Dylan.

Que queremos que un Montesco se case con un Capuleto – dijo Margot.

Pues ya vemos que Arturo se casara con Sara –dije sin ningún sentimiento- ¿y cuál es la otra?

-mi padre me miro y suspiro- Lucy, mi niña, antes que cumplas 20 años tienes que casarte –dijo mi padre.

-me levante de un salto de mi asiento- ¿Qué? ¿Por qué? - ¿esto es real? ¿esto realmente esa sucediendo?

Y te casaras con un Montesco, Lucy tú vas a heredar todo el dinero de nuestra familia y el que se case contigo va a obtener gran parte del dinero de los Montesco.

-salí rápidamente del comedor, podía escuchar que todos me hablaban, subí rápidamente a mi habitación, tome una maleta y comencé a meter lo indispensable en ella, me sentía destrozada, mi gran amor se casara con mi hermana... Arturo engaño a mi hermana ¡¡conmigo!!, y mi familia... siento como si me hubieran vendido, tome el dinero que tenía guardado para emergencias, tome las lleves de mi carro, espere a que pasaran las horas para poder salir de la casa, salí con mi maleta, mochila y un bolso, me estaba dirigiendo a mi carro.

Lucy!! –grito alguien a mis espaldas, reconocí aquella voz, no voltee a verlo y abrí el maletero y comencé a meter las cosas.

¿Qué quieres Dylan? – voltee a verlo.

Lucy... -yo estaba al borde de las lágrimas.

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