Sin Tapabocas.

A Little Death

Sexo.

Simple y puro es lo que define a muchas mujeres de edades diferentes a lo largo de su vida. Seamos sinceras por primera vez con nosotras mismas, por lo menos si nunca lo has hecho, créanme sincerarse con una sirve más de lo que un psicólogo puede hacer con tu mente en sesiones pagadas, por lo menos si lo aplicamos a este caso (no se vayan a ir por las nubes).

Prosiguiendo con nuestro tema. Sean sinceras, por favor.

¿Nunca han sentido la necesidad de gritar "quiero sexo" solo eso? O ¿Papi, quien fuera mona para montarse en ese palo?

Claro que lo han tenido que sentir, seas virgen o no, todas tenemos nuestros momentos en que los cuerpos piden y la mente quiere. Por lo menos yo sí y les seré totalmente sincera en esto.

Soy una virgen de 19 años con un apetito sexual que crece con el paso de los años. Y todo comenzó de una manera indiscutible. Comenzó con el auto-placer, lo descubrí a los 12 años, leyendo un libro de clases en el bachillerato llegamos a la parte de la pubertad y allí lo leí por primera vez "masturbación".

Le pregunte a mi madre incluso que era eso porque el libro no hablaba nada claro del concepto. ¿Por qué un libro que debería abrirte las puertas al conocimiento no explica algo tan básico? Pues, no lo sé.

Mi madre tampoco sabía cómo describir algo tan simple, lo veía mal incluso, aun hoy en día lo ve mal. Yo no lo hago, lo veo como algo de auto-descubrimiento sexual, porque no hay mejor manera de conocerte que experimentando contigo misma, sea en el ámbito sexual o en cualquier otro, conocerte a ti misma siempre tendrá que ser una de las prioridades más grandes de una mujer.

Siguiendo el relato, el porno fue aquel que me dio la respuesta que buscaba para comenzar el proceso de auto-descubrirme y abrirme las puertas a un mundo al que entraría llena de una curiosidad inaudita.

Fue extraño porque no sabía exactamente qué estaba haciendo hasta que comencé a sentir placer por algo tan simple como frotar y la ola del primer orgasmo no fue algo que tardo en llegar.

Mis días fueron a partir de allí, días en donde buscaba saber más sobre el sexo, no sobre el amor, solo sexo. Quería saber tanto como pudiera porque era algo que me parecía interesante y la manera en que mi cuerpo se sentía, era la razón más grande por lo que lo hacía, sentir calor y conocer que era todo aquello que quería experimentar.

Cabe resaltar que sigo siendo virgen porque a pesar de querer experimentar sabía que tenía que esperar antes de volverme loca.

Pero con esto les digo, pequeñas jóvenes y adultas o quien sea, auto-descúbrete... siéntete... conócete... pero sobretodo experimenta porque te darás cuenta de que hacer todo eso lleva a algo que hará que te sientas bien contigo misma en algún punto. No es que sea promiscua, es que hace mucho decidí que no vale la pena martirizarme por reglas de una sociedad que tiene que aprender que nosotras también pensamos en algo tan simple como el sexo.

Por lo que... les dejare una pequeña canción para incitarlas a descubrirse.

The Neighbourhood - A Little Death.