Caitlyn Se Apellida Caos

#1

Hoy es Miercoles, con M de...

¡MIERDA ME QUEDE DORMIDA! 

Abro mis ojos y de un rápido salto ya estoy fuera de mi cómoda cama, corro de manera desesperada al baño pero como siempre gracias al desorden de mi habitación mi cuerpo aterriza en el frío suelo.

- Que manera de comenzar el día, Caitlyn - digo cerrando los ojos hasta que llega el recuerdo de que voy tarde al trabajo. 

Lentamente esta vez me paró y camino al baño de mi apartamento, porque sí vivo Sola, soy una mujer totalmente independiente de 21 años que dejo el nido.

Bueno, quizás, no fue mi idea dejar el nido sino de mi querida mamá ya que  se volvió loca con tantas cosas que rompía diariamente, no apropósito, gracias a mi don de ser un total caos. Así que al cumplir mis 18 con su ayuda compré un lindo y cómodo apartamento, No gigante pero se pueden vivir tranquilamente en él.

Una vez lista salgo en dirección al trabajo, cierro la puerta y me encaminó hacía el elevador, entró y veo a un guapo hombre salir de éste. Tiene el pelo castaño y corto lo lleva de manera desordenada cosa que luce condenadamente bien,  llevaba  un par de cajas en sus brazos musculosos, lo sé ya que usa una polera blana de manga corta apegada a su trabajado cuerpo, tiene una espalda ancha y ¡uuf! ¡Llamen a los bomberos que me estoy incendiando! Tiene un trasero que me dan ganas de agarrar. ¡Que hombre más guapo!

- Preciosa una fotografía dura más - que voz más caliente podría ser locutor porno - ¿siquiera esa profesión existe?

¡Oh mierda pense en voz alta!

- ems...mmm... - no logro articular ni una simple palabra solo balbuceos salen de mi boca- Me voy.

Él ríe, mientras trato de tapar mi rostro con mi pelo para que no se note lo sonrojada que estoy, no es como si nunca me pasarán este tipo de vergonzosas situaciones es sólo que ¡diablos! el es muy sexy y quede como una torpe acosadora frente a él, sinceramente si soy torpe, pero no lo tenía por que saber de manera inmediata, quizás con el tiempo el se daría cuenta de que soy el desastre hecho persona, pero bueno ya está.

Me pareció bastante agradable a la vista pero es un poco arrogante y serio, espero que no sea como Margaret la vecina de 40 años del piso de enfrente esa mujer es demasiado aburrida y aborrece el desorden además de que es del tipo de mujer que por vivir de buena manera menosprecia a los demás que según ella no son de su clase, a mi por lo menos me dice hola junto a su cara de desagrado. Es una versión femenina del grinch.

Volviendo al tema de que voy tarde al trabajo, Presionó el botón con el número menos uno en su centro muchas veces seguidas para que el elevador cierre las puertas. Una vez sola en esas paredes con espejos analizó mi aspecto llevo un pantalón negro formal que es ajustado a mi pequeña cintura,  abajo de éste me puse un body blanco con un bleezer amarillo todo esto es compañado con unos tacones negros y una cartera blanca. Mi rostro está maquillado de manera muy natural además de mi cabello rubio, suelto y liso.
No me considero una mujer desafortunada en cuento a mi físico se refiere, no tengo unos grandes atributos, pero son proporcionales a mi cuerpo  lo que me hace lucir un lindo físico.