CARMESÍ

5

Caroline no tardo mucho con la cena, no le preste mucha atención a lo que me llevaba a la boca, no podía sentir el sabor de la comida, tampoco me había dignado a ver que era lo que bebía, el miedo que sentía hacia él... era lo que me tenia distraída, de todo, menos de ese reloj que colgaba en cima de un estante, ese sonido tan repetitivo... tick, tack, tick, tack, era lo que me mantenía consiente de cada sonido detrás de la puerta, tal vez estaba pensando demasiado, aun  si el llegara, aun si estuviera en frente mio, no podría hacer nada, no podría enfrentarle, jamás podría escapar de él, aun si llorara, gritara o me retorciera de dolor, solo haría que él se sintiera deleitado por cada reacción mía, ya lo dijo una vez "Tus mejillas rosadas, tus lagrimas en ellas y ese temblor de tu cuerpo aterrado es lo que más me excita, vamos, grita con más dolor, GRITA PARA MI." 

Una, dos, tres horas, habían pasado y mi nerviosismo también, todo estaba marchando bien, aun seguía observando en ratos la puerta de la entrada, me dispuse a ver una película, cuando la luz del vecindario se fue, si, un apagón, iría a la casa de Caroline pero dijo que saldría, gracias a mi tan buena suerte la casa poco a poco comenzaba a tornarse tenebrosa, así que decidí salir a dar una vuelta ya que todos mis vecinos estaban fuera con lamparas hablando de lo sucedido, camine hasta mi parque preferido por suerte este tenia electricidad, una chica estaba sentada en uno de los columpios, era demasiado adorable, tenia dos coletas una falda negra y blusa de gato color azul, era muy linda a decir verdad, no pude evitar compararme con ella, pero si mi autoestima esta siempre baja ahora termino hasta el suelo, seguí caminado hasta llegar al otro columpio, me senté y comencé a balancearme.

-Da miedo ¿no?- su voz es tan dulce y adorable, simplemente no puedo ignorarla.

-¿Que cosa?- pregunto con voz áspera"necesito hablar más, mi voz es de una anciana."

-La obscuridad- dice haciendo un puchero."pero que niña tan linda."

-¿La obscuridad?, por que daría miedo, ella no te va a comer ni nada parecido, es tonto tenerle miedo- contesto en un tono burlón mientras me sigo balanceando. 

-Si no le tienes miedo ¿que haces aquí?-

-Pensar- digo en tono neutro

-¿Que piensas?- pregunta con curiosidad

-Cosas de adultos- respondo 

-Iug, pervertida- responde de manera acusatoria 

-¿Que estas pensando? ¡ese tipo de cosas no!- respondo inmediatamente casi gritando. 

-¿Entonces?-

-Cosas que una niña tan pequeña como tu no podría entender-

-¿Niña?-responde con enfado -ambas somos niñas,¿cuantos años tienes?-

-Doce-

-Yo once-dice mostrando decepción.

- Lo ves, aun eres una niña- respondo con altanería.

-Solo por un año- dice haciendo do otro puchero.

-¿Cual es tu nombre? el mio es Alison, vivo cruzando la calle y¿tu?-

-Soy Daely, vivo a unas calles de aquí-

-¿Daely? nunca lo había escuchado, bueno, ya me tengo que ir, es tarde, ¿vendrás aquí otra vez?- se balancea con fuerza y da un brinco cayendo casi de rodillas al suelo, se voltea y me sonríe.

-¡Siempre vengo aquí!- respondo y sonrió.

-¡Entonces, nos vemos mañana!- grita mientras agita sus manos de un lado a otro y sale corriendo en dirección a su casa" tengo una amiga" sonrió, mientras me balanceo con más fuerza e imito a Alison, solo que yo si me caí raspandome ambas manos.

Los últimos tres meses a pesar de lo que me hacia él, tener una amiga como Alison me hacia bien, ella era esa pequeña esperanza que me daba la vida, ella me daba fuerza, ella me estaba salvando, no importaba si terminaba lastimándome como  siempre, no importaba , a veces lo pateaba, gritaba, lo rasguñaba, claro, no si ganarme unos buenos golpes o amenazas, pero al menos trataba de defenderme, jamas le dije a Alison lo que me hacia el señor Adam, solo sabia que había una persona que me molestaba. 
Hoy era un día en los que el señor Adam le pedía a mi madre permiso para que fuera con su "hijo" a jugar a su casa, mi mamá acepto como siempre, él dijo"hoy te tengo una sorpresa especial mi pequeña fierecita"  en un tono demasiado burlón.El auto no se dirigió a  la casa del señor Adam como siempre, esta vez a un lugar apartado de la ciudad, por un camino de tierra llegando a una construcción en ruinas, de donde a pesar de aun estar lejos se escuchaba unos gritos desgarradores, como si a alguien lo estuvieran torturando.

-baja mi hermosa princesa, entra al castillo  que tu mascota te espera- sonríe de la manera más cruel posible mientras otro grito desgarrador sale de ese lugar.
Mis piernas tiemblan y un nudo en mi garganta me dificulta la respiración, poco a poco me voy acercando al lugar, volteo al escuchar una risa espeluznante proveniente de él, mis lagrimas están al borde de derramarse, no aguanto más y salgo corriendo al lugar de donde proviene esos gritos encontrándome a Alison gritando desnuda con sus manos y pies amarrados, en un charco de sangre, su cuerpo entero llego de golpes y cortadas profundas especialmente en su espalda, al levantar su rostro, nuestras miradas se encontraron, su boca estaba llega de sangre, intentaba hablarme, pero solo salina de balbuceos de su boca,  mientras con desesperación en sus ojos me suplicaban ayuda, yo estaba petrificada en mi lugar, mis lagrimas recorrían mi rostro, mi cara llena de horror y mis oídos con ese incesante pitido, unos pasaos a mi espalda y otro grito proveniente de la garganta de Alison me hicieron reaccionar, poco a poco fui recobrando mis fuerzas y sentidos lo suficiente como para correr hacia él e intentar golpearlo pero con un simple movimiento me hizo caer al suelo,  me sujeto por la espalda y me hizo observar a Alison mientras ella gritaba y se retorcía en el suelo de desesperación.

-mírala bien,mi princesita, esto le pasara a tu mami si sigues haciéndote la valiente conmigo, ¿entiendes? este es solo un aviso, y tu,- apunta a Alison- esta niña es la razón de tu tan corta visita a este mundo, ella es mía y tu solo eras otro de sus puntos débiles, a las mascotas hay que hacerlas que obedezcan ¿no estas de acuerdo? bueno, basta de charlas, Daely, no juegues conmigo de nuevo ¿si?- pregunta de una manera dulce- sabes, siempre me eh preguntado... que pasaría si le inyectas cloro a una persona... bueno, nunca tenemos oportunidades como esta, así que hay que aprovecharlas.- Alison comienza a gritar de nuevo y a intentar patear a uno de los empleados que nos había acompañado hasta ese lugar, yo intentaba zafarme del agarre de él sin éxito, mientras gritaba que pararan una y otra vez, hasta que mis lagrimas se habían acabado, mis fuerzas también, mi voz se había esfumado y la vida de Alison también.  


(｡♥‿♥｡)¡HOLAAAA CHICOS! GRACIAS A ESAS PERSONITAS QUE HAN ESTADO AGREGANDO MI HISTORIA, MUCHAS GRACIAAAAS, SIGNIFICA MUCHO PARA MI, Y TAMBIÉN A TODOS AQUELLOS FANTASMITAS QUE ESTÁN LEYENDO CARMESÍ... ¡UN SUPER ABRAZO A TODOS!
⊂( ◜◒◝ )⊃

PD: ¡POR SI LAS DUDAS, EL ARCO DE LOS RECUERDOS DE NUESTRA PROTAGONISTA YA TERMINARON!ヽ(ﾟ〇ﾟ)ﾉ 

PD2: ¡LAS FALTAS DE ORTOGRAFÍA SERÁN CORREGIDAS AL FINAL DE ESTA HISTORIA,GARCÍAS POR LEER!(ノ∀￣〃)