La Loca Historia de mi Burrito Sabanero#1 [Terminado]

EL FINAL DE NUESTRA HISTORIA

  Así partimos en mi caravana tirada por mi burrito sabanero, aunque no estemos en la sabana, mi amigo ornitorrinco y yo, porque el jaguar había desaparecido de repente. Me entristecí de nuevo, miré fijamente mi guardapelo, me alegré de que mi muy amiga morsa por fin fuera feliz.

Para no entristecernos más, ornitorrinco y yo empezamos a cantar una canción casi tan ridículamente ridícula como esta historia:
Hola me llamo Lola... y soy una caracola... y a mi lo que más me mola es por la mañana decirte Hola me llamo Lola... y soy una caracola... y a mi lo que más me mola es por la mañana decirte Hola me llamo Lola...
Y así nos tiramos la tres horas y media (o eso creo por que no tenía reloj) que nos pasamos en mi caravana.
  Por fin llegamos a un claro en medio de un bosque con un lago enorme, habitado por castores y ornitorrincos.
Me sentí más hundida aún cuando me di cuenta de que llegaba el final de esta maravillosa aventura y que me tendría que despedir también de mi amigo ornitorrinco.
  Solo le di un abrazo y dejé que se fuera.
Me sentí aún peor al darme cuenta de que no le había dicho ni adiós, pero no quiero hablar de eso.
El caso es que entonces, y SOLO entonces, me di cuenta de que el verdadero protagonista de esta historia no era la morsa, ni el ornitorrinco, ¡NI SIQUIERA YO! El verdadero protagonista de la historia era...
                         ¡MI BURRITO SABANERO, AUNQUE NO ESTEMOS EN LA SABANA!
Entonces reflexioné. Me di cuenta de que el propósito de la historia era dejar en su lugar a nadie más y a nadie menos que mi fantástico y maravilloso burrito sabanero, aunque no estemos en la sabana, y volví a emprender mi viaje.
Esta vez a ni mas ni menos que la sabana, de donde era procedente mi burrito sabanero, aunque no estemos en la sabana.
  El caso es que esta historia termina con que me retiré a la sabana para vivir la vida feliz con mi burrito sabanero, que por fin está en la sabana.

(Esta historia está dedicada a mi amiga Andriuscki , la primera que oyó esta historia improvisada en un viaje de autobús)