AMOR DE GEISHA

FRÁGIL Y FUERTE

*POV MIKASA *

Aún seguia corriendo con todas mis fuerzas, sentía sus pasos detrás de mi, no dejaba de enganchar mi kimono en las ramas de los árboles, comencé a llorar, caí de rodillas al suelo, estaba muy cansada, me rendí y espere lo peor en ese bosque oscuro donde apenas se veía la luz de la luna, tampoco tenía con que defenderme, cada vez eran menos las posibilidades de salir viva de allí.
De nuevo siento pasos, cerré los ojos fuertemente.

¿?- ¿princesa? ¿qué hace aquí?

No pude creerlo, reconocí esa voz que me alivio mucho no pude dejar de llorar.

Mikasa- por favor!!, ayúdame!, quiero irme de aquí!

*POV LEVI *
"unos minutos antes"

Yo me encontraba haciendo guardia y así que decidí ir al bosque ya que es un lugar donde podría esconderse cualquier enemigo.
De repente sentí unos pasos a lo que decidí averiguar que era, la vi de rodillas en el suelo llorando ¿otra vez debía verla asi?

Levi- ven, trata de levantarte

La agarré de la cintura y la ayudé a levantarse pase uno de sus brazos alrededor de mi cuello y la ayudé a caminar hasta mi templo.

*POV ESCRITORA *

Alguien los observó detrás de un árbol con furia, maldiciendo en voz baja, jurando que volvería por la princesa y eso no se quedaría así nada más.

Ambos llegaron al templo del capitán el la llevo hasta su habitación y la sentó en la cama.

Levi- espera aquí, voy a traer algo de té para ti

Ella solo asintió, estaba muy asustada y nerviosa, sabía que Kenny la tomaría tarde o temprano.
Mikasa miró su kimono rasgado por las ramas y una herida en su cuello que sangraba quizá fue por las ramas.

Levi- toma esto, te aliviara, es para.....¿estas sangrando?

Mikasa- no es nada

Levi- espere aquí

Fue hasta un pequeño cajón, tomó unas vendas y un paño mojado con agua y comenzó a limpiar la herida.

Levi- ¿vas a decirme que te pasó?

Mikasa- no, sólo piensa que no viste nada

El no habló más, envolvió el cuello de ella con la venda, tomó una silla y se sentó.

Levi- escucha, si no me dices que sucedió ¿cómo voy a ayudarte?

Mikasa- ya te dije que no necesito tu ayuda

Levi- oi, ves que tengo razón, eres una mocosa

Mikasa- cállate!, -gritó- tu no sabes nada sobre mi, no hables como si me conocieras

Un silencio llenó la habitación ambos sin mirarse a los ojos

Mikasa- Perdón, no fue mi intención gritar, sólo es que ni yo sé que me está pasando

Levi- escucha Mikasa, es verdad que no te conozco bien, pero cualquiera se daría cuenta que te está pasando algo, pero si no dices nada ¿cómo podría ayudarte?

Mikasa- simplemente no lo hagas, no quiero la ayuda de nadie

Levi- quédate aquí esta noche

Mikasa- ¿dónde dormirás tu?

Levi- no voy a dormir, me quedaré vigilando o simplemente me sentare en los escalones afura.

Sin decir una palabra más el salió de la habitación, se sentó afuera en los escalones y miro el cielo, preguntándose ¿como había llegado a esto?