Capítulo 1: ¡Qué empiece el juego!

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Entonces algunos empezaron a protestar pero sobretodo mi amigo Eliezer al que llamábamos Eli.

Eli: ¡No puedes hacer esto! ¡Nuestros padres ya habrán notado nuestra desaparición y muy pronto la policía estará buscandonos! -¿Eso crees? ¿Y si te dijera que vuestros padres creen que estáis en un bonito campamento disfrutandolo mucho? Vuestros padres fueron muy fáciles de engañar, aunque no todos, pero bueno, ya nos encargamos de los padres que no quisieron enviaros al campamento... ¡Como los tuyos!

Eli:¡Hijo de puta! ¿¡Qué les has echo!? -No te preocupes de eso ahora, mejor preocupate de ti mismo, ya que dentro de poco os estaréis matando entre vosotros.

Eli:¡Ja! Todos nosotros somos amigos, encontraremos la forma de salir de aquí todos juntos, ¡sin matar a nadie!

-¿De verdad? Buena suerte con eso. Jajaja, en fín, ahora pasare a explicaros varias cosas, iréis saliendo de uno en uno cada cinco minutos, a todos se os dará una mochila con suministros como comida y armas. La posición en la que salgais será elegida al azar, al ganador le recogeran en helicóptero en el sitio donde aterrizamos, no intenteis escapar porque alrededor de este gran campamento solo hay mar y los tiburones os comerian en segundos. Si al final de un mes no hay un ganador se os informarán de las personas que quedan vivas y de su localización.

Ahora sin más dilación, buena suerte y ¡qué empiece el juego!

-Entonces sacaron una bolsa de plástico y empezaron a sacar unos trozos de papel con nuestros nombres, yo vi como iban saliendo todos mis compañeros uno a uno, hasta que solo faltaba yo, cuando dijeron mi nombre, me levante a coger la mochila, no sin antes mirar otra vez el rostro de aquellas personas sin alma que nos estaban obligando a jugar a este juego.

Entonces salí de allí, mire mi mochila para ver que contenía, una botella de agua, un machete y varias latas de comida enlatada, esto me ayudaría a sobrevivir por hoy, pero, si quería seguir haciendolo tendría que buscar suministros en alguna otra parte.

Seguí caminando a lo largo de ese enorme campamento, que era en realidad un gran bosque, por lo que seguramente habrá fruta en los árboles y quizá incluso animales para cazar.

Me detuve cuando escuche unas voces y me alegré, podría empezar a formar el grupo para salir de aquí todos juntos.

Yo: ¿Hola? ¿Quiénes sois?

Eli: ¿Juan eres tú? -Ahora podía distinguir una de las voces, era Eli.

Yo: Sí soy yo.

Valeria: ¡Juan, eres tu de verdad! ¡Cómo me alegro de verte! - Y esa que venía por allí era Valeria, la novia de Eli y otra de mis buenas amigas.

Eli: Bueno, pues uno más para el grupo, ya queda menos.

Yo: Si es verdad, tenemos que reunir a todos cuanto antes y salir de aquí.

Valeria: Bea también esta con nosotros, ahora mismo esta en nuestro refugio.

Yo: ¿Vuestro refugio?

Eli: Jaja, en realidad es sólo una cueva que encontramos por ahí pero bueno, es mejor que nada.

Por cierto Juan, ¿qué te ha tocado en tu mochila?

Yo: Un machete, agua y latas de comida enlatada.

Eli: Genial, nosotros tenemos comida también y también un arco y varios utensilios como una navaja, una linterna... ¡Ah! Y Bea tiene un kit médico también, por cierto nosotros hemos puesto toda la comida junta para repartir raciones diarias y organizar las raciones, si te parece bien tu también puedes hacerlo.

Yo: Sí, me parece una buena idea.

Valeria: Genial, entonces vamos hacia el refugio, no te olvides de el camino porque vamos a estar entrando y saliendo continuamente.

-Entonces nos pusimos en camino hacia el refugio, no se porque pero estaba intranquilo, miraba a mis lados, parecía como si alguien nos estuviera siguiendo, no, no puede ser, me estoy volviendo loco, tengo que dejar de pensar en cosas negativas. Entonces llegamos al refugio, estaba bastante bien situado ya que no estaba a la vista y había algunos árboles con fruta al lado que podríamos recoger más tarde y nos serviría para sobrevivir.

Eli: Bueno, ya estamos aquí.

Valeria: Bea ven aquí, mira quien esta aquí.

Bea: ¿Qué pasa? - Si, esa era Beatriz otra buena amiga mía, dios, el día acaba de empezar y ya somos 4, salir de aquí será más fácil de lo que imaginaba.

Bea: ¡Juan eres tú! No puedo creerlo, ¿cómo lo habéis encontrado?

Eli: Simplemente hemos tenido suerte y nos lo hemos encontrado por ahí.

Bea: Bueno, entrad, tenemos que hablar de muchas cosas. -Entonces entramos dentro, era una cueva bastante grande, desde luego serviría para nosotros 4.

Valeria: Aquí es donde hemos puesto la comida, puedes dejar aquí la tuya.

Yo: Vale, aunque me quedaré el agua ya que nos puede entrar sed en cualquier momento.

Bea: Bien, vamos a hablar de algunas cosas, la comida que tenemos, contando con la fruta de los árboles de afuera, durará varios días pero tenemos que empezar a buscar más comida, también tenemos que buscar una fuente de agua y tenemos que encontrar al resto de la gente.

Eli: Muy bien salgamos fuera un momento para planificar algunas rutas para buscar comida.

-Entonces salimos de la cueva y empezamos a planificar las rutas.

Eli: Bien, por allí vi algunos conejos y pueden haber incluso más animales por lo que... -¡Bam! - De repente se oyó un disparo y una bala paso entre nosotros.

Eli: ¿¡Pero que coño!? - Mire hacia el lugar de donde venía el disparo, había alguien que parecía ser.. ¿Alexandra? No, no podía ser ella, ella era una buena amiga y si era ella seguro que había una explicación para todo esto.

Valeria: ¿Esa era... Alexandra?

Bea: Sí, creo que era ella.

Yo: Pero seguro que hay una buena explicación, quizá se ha pensado que éramos esos tipos o simplemente se ha asustado, tenemos que buscarla y hablar con ella. Aunque alguien se tiene que quedar vigilando la cueva.

Eli: Yo lo haré, corred, esta huyendo adcanzadla y hablad con ella.

-Entonces salimos corriendo detrás de ella por el inmenso bosque lleno de árboles y matorrales, en un momento llegamos a un gran árbol y de detrás de el oímos su voz.

Alexandra: ¡No, marchaos, no os acerqueis!

Yo: Alexandra, se que estas nerviosa y que puedes tener miedo, no te culpamos por lo de antes, pero somos tus amigos, sólo queremos ayudarte, podemos salir de aquí todos juntos.

Alexandra: ¡No, marchaos, no os acerqueis!

Valeria: Vamos Alexandra no tengas miedo.

Bea: Sí, puedes confiar en nosotros.

Yo: Voy a acercarme lentamente, no dispares, ¿vale? -Entonces me fui acercando hasta que...

Yo: ¿¡Pero qué cojones!?

Alexandra: ¡No, marchaos, no os acerqueis!

Yo: ¡Es una grabadora!

Bea y Valeria: ¿¡Qué!?

-¡Bam! - De repente se escucho otro disparo.

Valeria: ¡Ha venido del refugio!

Yo: ¡Rápido, vamos! - Corrimos todo lo que pudimos y cuando llegamos vimos que nos habían robado casi toda la comida y a Eli tirado el en suelo sangrando.

Todos: ¡Eli, noooo! -Valeria y Bea fueron corriendo hacia Eli pero yo no pude, me caí de rodillas al suelo no podía aceptar todo esto, Alexandra... ¿Ella ha sido capaz de algo así? ¿Porqué no ha venido con nosotros para salir de aquí todos juntos? ¿No podemos confiar en nuestros amigos? Lo que sabía era que yo había confiado en Alexandra y por mi culpa ha pasado todo esto.

Eli... no puede ser... Eli está... ¿Muerto?

Campamento escolar  de supervivenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora