Capítulo 2: Problemas de grupo

23 1 0
                                    

Dentro de mi cabeza estaban pasando muchas cosas hasta que una sola cosa me hizo salir de mi trance.

Valeria: ¡Todavía respira!

Yo: ¿Qué? -Lo había escuchado bien pero no me lo podía creer.

Bea: ¡Corre ve a por mi kit médico, y coge también unas pinzas para sacarle la bala!

Yo: Vale, quitadle la camisa para poder sacarle la bala. - Cogí el kit médico y las pinzas y corrí hacía Eli para salvarle la vida, tenía una oportunidad de salvarlo y no la iba a desaprovechar.

Eli: ¡Ahhh!

Yo: Eli no te preocupes, esto va a doler bastante pero tienes que aguantar, no te voy a dejar morir aquí.

-Entonces cogí la pinza y comenze a sacarle la bala.

Eli: ¡Ahhhhh!

.

Yo: Vamos Eli sólo un poco más, tienes que aguantar.

-Después de un poco más de esfuerzo conseguí sacarle la bala pero aún quedaba la peor parte...

Yo: Bien, ahora tenemos que desinfectarte la herida, pasadme ese bote de ahí. Eli esto te va a doler mucho pero no hay otro remedio.

-Entonces procedí a desinfectarle la herida, le eché un poco de aquel bote y Eli pegó otro grito antes de desmayarse.

Valeria: ¿¡Qué le pasa!?

Yo: Tranquila, sólo de ha desmayado a causa del dolor, ayudame a ponerle las vendas.

-Entonces le rodeamos el torso con vendas por el lugar del agujero de bala y le volvimos a poner la camisa.

Bea: Y ahora, ¿que hacemos?

Yo: Alexandra nos ha robado bastantes suministros por lo que tendremos que conseguir más, y rápido. Eli no puede moverse y alguien tiene que vigilarlo mientras se recupera.

Valeria: Yo lo hare.

Yo: De acuerdo, toma mi machete en caso de que pase algo, yo cogere el arco y me iré con Bea a cazar.

Bea: De acuerdo, vamos, y Valeria, ten cuidado.

Valeria: Lo tendré, gracias.

-Entonces salimos del refugio y nos dispusimos a ir a cazar mientras hablábamos de otras cosas.

Yo: Si ves algún lugar que pueda ser un refugio, me lo dices ¿vale?

Bea: ¿Y eso?

Yo: Alexandra sabe de nuestro refugio y podría volver en cualquier momento, ¿quién sabe? Puede que tenga otros compañeros con ella y definitivamente no estamos preparados para enfrentarnos a algo así.

Bea: ¿Quieres decir que Alexandra no es la única que nos atacara?

Yo: Pues ya... no se que pensar. Todo esto me supera, se que no debería pensar en nuestros compañeros así pero... no, seguramente son sólo cosas mías, que Alexandra se haya vuelto así no significa que los demás también vayan a hacerlo.

Bea: Si, tienes razón, aunque esta claro que tenemos que tener cuidado.

Yo: Eh, mira, allí.

Bea: ¿Qué pasa?

- Eran unos ciervos, yo nunca había comido su carne y la idea me repugnaba un poco, pero en nuestra situación, no nos quedaban muchas opciones.

Bea: ¿En serio vamos a comer eso? Yo... yo no puedo matarlos simplemente no...

Campamento escolar  de supervivenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora