capitulo 28:conociendo la verdad:Hinata.

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pov Hana

Por fin mi dulce hinata, llegó a este mundo, es muy sana y hermosa y lo que más me gusta de ella son su hermosos ojos, son un color perla muy peculiar, me encantan.
Sin embargo...hiashi no está deacuerdo conmigo.

Hace unos días vivimos la aparición de un Dios o un demonio más bien, que nos maldijo y tras eso, los Reyes, Minato y Kushina murieron, incluyendo al pequeño en el vientre de la reina. Nunca había llorado tanto y ahora lo hago constantemente, hiashi a llamado monstruo a nuestra hija y no la quiere.

...

Ya a pasado un tiempo, hinata a crecido muy bien, hiashi me a pedido o más bien ordenado que le cubriera los ojos, dice que ella es peligrosa y que sus ojos podrían matar. No lo creo, pero tuve que obedecerlo.

...

Salí temprano al mercado como lo hacía siempre, pero ahora que lo hago, no es de la misma manera, antes hiashi me despedía cariñosamente o me acompañaba, pero ahora...

{...}

-hiashi, voy al mercado¿quieres que te traiga algo?-le preguntó con la voz apagado-

-vete ya-le dijo sin más, lágrimas se desprendieron de los ojos de la señora hyuga-

-vuelvo pronto...-dijo esto con la firmeza que logró liberar y salió de la casa-

{...}

Cuando por fin llegue, me di cuenta que había venido sin el dinero, así que tenía que devolverme a la casa, había pasado caminando casi media hora y tenía que volver denuevo por el mismo sendero.

Paso el rato,pensando en mi vida, sufriendo lo que tengo ahora, un esposo que no me quiere, una hermana distante y mucha soledad, lo unico por lo que vivo es por mi hija.

Llegue por fin de vuelta y me encontré con el carruaje rojo de mi hermana¿que estaba haciendo aquí?en cuanto llegue a la puerta abrí despacio y no la vi en la sala.

Sentí un ruido arriba y decidí revisar, cuando llegué a la habitación de hinata, estaba plácidamente dormida, la mire con ternura y acaricie su mejilla.

Volví a escuchar aquel ruido y me dirigí temerosa a mi habitación, los sonidos era muy fuertes y me daba cierto miedo.

Cuando abrí la puerta mi corazón se detuvo, mis ojos dispararon lágrimas y mi respiración se cortó.

Vi ante mi, a mi esposo con mi hermana kurenai en nuestra cama, revolcandose, como si nada, besándose salvajemente.

Camine lentamente hacia atrás dando pasos lentos, mis piernas no me permitían más movimiento, mis rodillas se doblaban y mi labio inferior temblaba mientras negaba con la cabeza. Pise algo que me delató y me dedicaron distintas miradas, hiashi estaba mirando algo sorpredido y kurenai con miendo.

-ha-hana...nee-sama, de-dejame explicarte...-me decía cubriendo su cuerpo desnudo-

-no.......-negaba todavía-NO!!!

Corrí y corrí, sin detenerme, no me di cuenta, mis ojos estaban obstruidos por las lágrimas y mis pies se movían solos, mientras escuchaba los gritos de mi hermana. Mis pies se doblaron en las escaleras y caí, un fuerte golpe me sorpredio y un líquido frío invadio mi cabeza.

....

Hinata...hija mía, quería escribirte esta carta en mi diario, para que supieras la verdad, si en algún momento pensaste que había sido tu culpa el que yo muriera estas muy equivocada, lamento haberte dejado, pero el destino me otorgó esta maldición, pero tú no eres parte de eso, eres mi tesoro, quien iluminó mis días, mis últimos días.

El Destino Los UnióDonde viven las historias. Descúbrelo ahora