DIARIO DE UN FUNDASHI (En Emision)

CAPITULO 12: CHANTAJE

Ya iba siendo hora para que Carter pasara por mi para poder ir a ese tonto concierto, la verdad es que no me emocionaba ir, pero tampoco dejaría que él se fuera a solas con ese tipo que aun ni conocía y ni sabia que intenciones tenia con Carter.

El timbre de la casa sonó, seguro Carter había llegado, decidí bajar a recibirlo. Al bajar escuche la puerta abrirse.

- Creí que no llegarías pronto - sonrió al bajar las escaleras, pero la sonrisa se me borra del rostro al ver quien era la persona que entraba por la puerta.

-  Así que esperabas a alguien, ¿ se puede saber a quien esperabas? 

- Solo a un amigo - conteste a secas, justo lo que me faltaba, ese tipo ahora viene a arruinarme la noche.

- ¿Un amigo o ... a tu amante? - tomo  un sobre que traia en las manos y me lo aventó a la cara - ¿ como coño explicas eso?

Tome el sobre que caído en el suelo, al abrirlo mire unas cuantas fotos, empece  a mirarlas una por una, eran fotos mías estando con Carter. 

- ¡ ME HAS ESTADO ESPIANDO!- grite enojado. Ya que esta no seria la primera vez que mi padre ponía a un investigador a espiarme.

- Si yo te estuviera espiando no estaría aquí ¿no crees?.- en eso mi padre tenia razón, cuando descubrió lo mio con Josh, fue mi madre la que vino a retarme y ha mandarme con un especialista. - Unos reporteros me contactaron esta tarde queriendo negociar o de lo contrario venderían las fotos a un programa de televisión, sabes que me importa muy poco lo que hagas con tu vida pero si haces algo que dañe la imagen de mi empresa...

- Si tu gran empresa, es lo único que te importa, espero que tu empresa se vaya de una vez a la mierda, así quizá estés mas pendiente de tu familia, por que vienes a retarme a mi, porque no vas a reclamarle a  la puta de tu esposa, tienes idea de con cuantos se anda acostando a diario... 

- Pues gracias a esa empresa de mierda como tú la llamas, es la que te da algo de comer a diario, es gracias a ella que no eres un muerto de hambre y puedes tener una gran educación. Encárgate de terminar tus andadas con ese chico o me veré obligado a mandarte al extranjero, al menos así no me vas a estorbar.

- No dejare de verle...- murmure en voz baja.

Mi padre camino hacia mi todo enojado y me lanzo una bofetada, haciéndome perder el equilibrio y caer al suelo.

- Si tu no te alejas de él yo me encargare de hacerlo desaparecer. - amenazo antes de salir de la casa.

Me levante del piso y camine hacia mi cuarto, no dejaría que le hiciera daño a Carter y mucho menos que me aleje de él, pero que podría hacer ahora.

Al llegar a mi cuarto me tumbe en la cama, para poder pensar en lo que haría para poder mantenerlo a salvo.

Esta vez no tenia aliados, aunque pensándolo bien nunca los he tenido.

Mi familia fue destrozada por culpa de mi padre, cuando a penas cumplía los seis años, mi madre descubrió a mi padre con su amante, desde eso mi madre se deprimió y cayo en el vicio del alcohol, gracias a un ex compañero de clases de mi madre, le propuso ayudarlo en su hospital que recién estaba abriendo, élla fue contratada como pediatra. Al principio creí que eso era algo bueno, pero conforme el tiempo pasaba élla pasaba mas tiempo fuera y ya casi ni la veía.

La mayoría de mi infancia la pase en casa de mi tía que no me trataba mal pero para ella era como si yo fuera un extraño, ya que solo me deba de comer por que mi madre se ofreció a pagarle todos los gastos de sus hijos.

Ahora solo veo a mis padres cuando necesitan reclamarme algo o en caso de mama solo cuando trae a sus tantos amantes a la casa.

A pesar a ya estar acostumbrado a estar solo, desde que conocí a Carter sentí lo que es tener a alguien que me quiera y no este conmigo solo por conveniencia.