D O S

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Yoongi caminaba por las oscuras y desiertas calles de Seúl, aún llevaba su traje negro, ese que siempre le exigían en la empresa para la cual trabajaba, llevaba una mochila negra, y caminaba sin rumbo fijo, simplemente se quería alejar de todo, quería descansar de la gente, el ruido, el dinero, de todo, quería desaparecer por unos cuantos minutos o talvez horas.

Se sentía cansado, estaba cansado de todo, estaba cansado de lo monótona que era su vida, estaba cansado de verlo todo en una simple escala de grises, pero el único que logró hacerlo ver todo diferente se había ido, estaba solo, aunque no del todo, aún conservaba a ese pequeño gato albino de ojos azul cielo, y aunque realmente amaba a ese pequeño ser, el pequeño gato no era lo suficiente para llenar el roto y vacío corazón de Yoongi, el de piel blanca simplemente no podía ver el mundo con el color que Jimin se lo había pintado, porque la pintura se desgasta y Jimin no estaba ahí para volver a pintarlo todo de colores, pero lo intentaba, intentaba hacer que otros chicos y hasta chicas le ayudaran a pintar su mundo de colores, quería volver a verlo todo nuevamente de colores, quería verle el lado bueno a la vida, pero no podía, lo intentaba, lo intentó con su antiguo vecino... ese tierno chico de sonrisa cuadrada, Taehyung, tenía un lindo nombre, su risa era bastante escandalosa pero Yoongi llegó a soportarla y hasta a quererla más de lo que alguna vez se imaginó, pero Taehyung solo le daba momentos de felicidad y vaya que lo apreciaba, pero el chico se mudó y siguieron siendo amigos... solo eso y nada más, a Yoongi no le sorprendió que el agradable chico conociera a alguien más y fuera feliz con esa persona pero no con el, al final las personas solían alejarse de él o al menos eso era lo que pensaba Yoongi. También lo intentó con la chica del café, esa chica de cabellos negros y piel blanca, Jisoo, tenía un lindo nombre y una linda sonrisa, solían verse después de que ella terminará su turno los sábados y desayunaban juntos los domingos antes de que ella entrara a trabajar, era una chica muy tierna, es la típica chica popular, esa que siempre se ve bien y es muy linda, Yoongi se sorprendió cuando la linda chica confesó que a ella le gustaba el, y él no le dijo que no cuando esa chica le pidió que fueran novios, era una chica que tomaba decisiones y las cumplía, que sin importar que ella seguía adelante y Yoongi la quería, no le dijo que si por lástima o algo por el estilo, le dijo que si porque ella era fuerte y luchaba con dientes y uñas, le dijo que si porque talvez ella lo ayudaría a salir adelante, talvez Yoongi no la quiso lo suficiente o ella simplemente le dijo que lo quería por lástima, Jisoo se fue, le terminó a Yoongi, renunció a su trabajo y probablemente hasta se mudó -algo que Yoongi no quiso comprobar- pero antes de eso ella le dijo algo a Yoongi

"No pienses que es tu culpa, no lo hagas, porque no lo es, no pienses que tu amor no fue suficiente para mí, porque si lo fue, me diste cariño, uno real, no solo viste mi cuerpo o mi rostro, me viste a mí como soy y lo aprecio, porque nadie había hecho eso, y si me voy, y si me alejo, no es por ti, aprendí a querer cada parte de mi a tu lado, lamento no poder reparar tu roto corazón, pero eso es algo que solo el verdadero amor lo puede y estoy segura de que yo no lo soy, pero espera, por favor Yoongi, no actúes desesperadamente, no hagas algo de lo que te arrepentirás en un futuro, algún día alguien llegará y como tú dices... Volverá a pintar tu mundo de colores"

Pero Yoongi seguía queriendo a Jimin, apreciaba todo lo que Taehyung y Jisoo le dieron, todo el amor que le aportaron, apreció las leves capas de pintura que ellos le echaron a la gastada pintura que tenía el mundo donde Yoongi vivía, pero solo Jimin lo hacía sentir completo, solo Jimin pudo amarlo lo suficiente como para ver hasta lo bueno en el vacío corazón de el pálido, Yoongi no entendía, seguía sin entender cómo es que pasó todo, cómo un día el podía estar besando los rellenos cachetes de Jimin y al otro estar echado en su cama pensando que Jimin lo dejo porque él no era lo suficiente.

Ya había pasado un mes desde que Yoongi le mando la carta a Jimin, esa en la que le decía que lo quería de vuelta, que quería tenerlo a su lado, esa en la que le dijo que intentaría ser feliz, talvez a Jimin no le importó o simplemente la carta fue a parar a otra persona, Yoongi no sabía exactamente qué significa el silencio del contrario, pero ¿por qué después de tanto tiempo debería darle una respuesta a Yoongi? Exacto, no había razón y Yoongi lo entendía

Cuando paró de caminar se encontraba frente a su casa, talvez su subconsciente no quería que se perdiera o el destino le decía que no era su momento, realmente no se percató de cuando había vuelto, el sólo abrió la puerta encontrándose con ese pequeño gato albino en brazos de alguien

—Yoongi... .—esa voz que el pálido escuchaba en sueños, esa voz que el pálido quería volver a oír, esa voz era real, y la persona de la que provenía estaba ahí, sentado en el sillón gris abrazando a ese pequeño gato albino

—Jimin...

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espero que hasta ahora les esté gustando 😊

PD: amo los gatos blancos, por eso siempre hay numerosas menciones de un gato albino

Lejos De Mi || yoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora