Hace algunos meses atrás conocí a un muchacho, pero no lo conocí de la forma normal en la que se les conoce a cualquier otra persona, no, lo conocí por Internet, quizás ahora ya no les suene raro escuchar de las relaciones a distancia. Antes ya había tenido una, y como era de esperarse el me puso el cuerno, y todo termino mal, en ese momento entendí que las relaciones a distancia no funcionarían nunca.
Pero apareció el, así es sentí una conexión especial. Hablábamos todos los días sin excepcion, pero solo hablábamos de madrugada, ya que en las mañanas no se conectaba y el estudiaba en la tarde. Yo hacia una excepcion con el y me desvelaba charlando con el, hasta que el me decía que ya no podía seguir despierto, la verdad es que a mi no me daba sueño, conversando con el me sentía bien, es algo que jamas había sentido con alguien más. ¡Oh claro!, olvide mencionarles que el es Mexicano, creo que siempre e tenido una pequeña conexión con ellos, ya que siempre estoy hablando con los Mexicanos.
Pero el era diferente. ¡Oh mi estimado Piero, no sabes cuan bien me sentía hablando contigo!
Me contó algunas de sus cosas, y yo a el también, sentía que podía confiar en el.
Las semanas pasaron, y cada vez hablábamos menos horas, el siempre decía que ya tenia sueño, o que su mamá le decía que ya debía dormir.
El me comentó que era un chico bastante amigable, pero que en este momento de su vida no tenía amigos, estaba completamente desolado, y que siempre estaba en su casa, yo era su única amiga, la única persona de quien no se había separado, pero había un deseo en el, regresar las cosas la normalidad, el me decía muchas veces que volvería a ser la misma persona que era antes, con muchas amistades y una vida de fiesta, la verdad es que me hacía muy feliz saber eso, pero después pensaba en que el se alejaría de mi, y que ya no hablaríamos como antes, es decir. ¿Quien preferiría conversar por messenger con una chica a la que no conoce, a quien no puede ver ni tocar? Pensamientos como ese me ponían muy triste y sabía que tenía que estar preparada para alejarme de el bruscamente. Pero muchas veces me agradecía el estar en su vida, y me decía lo feliz que le hacía que fuéramos amigos; me ponía tan feliz cuando le me decía ese tipo de cosas.....
Un día antes de su cumpleaños número 15 fue el último día que hablamos, el me dijo que tenía que dormir ya que al día siguiente tendría que ir a comer pizza con uno amigo suyo; así es, el estaba empezando a recuperar a sus amigos, lo noté cuando se demoraba en responder, el usualmente respondía muy rápido, pero los día anteriores el se demoraba mas de lo usual, aun que seguía siendo el mismo chico del que me enamoré. Al día siguiente le dije que le deseaba un feliz cumpleaños y que me hacía feliz tenerlo en mi vida que hacía mi vida mas linda...... Me desconecte por unas cuantas horas y cuando regrese el ya me había contestado, me puse muy feliz y leí su mensaje: "Gracias, la verdad casi nadie se acordó. Te quiero <3 Un amigo me invito a almorzar, ya regreso.
Feliz hasta el cielo por aquella demostración de cariño hacia mi, le respondí muy feliz, esperando su respuesta me quedé dormida, al despertar me di cuenta de que el no me había respondido, así que pensé: Tal vez en la noche se conecte y podamos seguir hablando. Espere algunas horas, el nunca se conectó.
Al día siguiente también fue lo mismo. Al atardecer de ese mismo día revise mi teléfono y el había leído mi mensaje, solo salía un visto sin respuesta. Quise hablarle pero mi orgullo me lo impidió, y desde aquel día no e vuelto a saber de el.
Supongo que debo de dar por perdida nuestra amistad.... <|3
