Capítulo 30.-Una promesa de amor

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Desde que la pequeña había sido separada de su pequeña familia no había dejado de llorar, lo que estaba provocando que tanto Hades como Zelena fueran perdiendo la cordura

—Haz callar a esa niña—dijo Hades molesto mientras miraba a la pequeña Robyn ponerse roja por tanto llanto

—Que es lo crees que estoy haciendo, esta niña no se calla con nada—dijo Zelena mientras la arrullaba, al poco rato la pequeña fue quedándose dormida por su llanto, Zelena la coloco en su cama—Por fin se quedó callada

—Sera mejor que esa niña vaya acatando las reglas o la mandare a un internado­—dijo Hades molesto

—Crees que a mí me agrada que llore todo el día—dijo Zelena con molestia

—Señores disculpe por molestar pero en la puerta los buscan—dijo una de las sirvientas de Hades

—Cuida a la niña—dijo Hades mientras miraba a Zelena y salía a ver quién lo llamaba

En la sala principal de la casa se encontraba Rumplestinkin con una de sus características sonrisas

—Que es lo que quieres Gold—dijo Hades mientras se cruzaba de brazos

—Vaya viejo amigo es así como me saludas—dijo Rumple mientras tomaba un copa de wiski

—Te dignas a venir a mi casa después de que te presentas como el abogado de ese sucio ladrón—dijo Hades

—Lo hago por mi hermosa Layce, ahora dile a tu mujer que nos entregue a la niña he conseguido una orden con la cual tiene el deber de compartir su patria con la familia de mi cliente—dijo Rumple mientras le enseñaba la orden con una gran sonrisa

—Tch, eres un maldito—dijo Hades—Haz ganado esta batalla pero no la guerra mí querido amigo—mientras lo dejaba solo e iba por la pequeña bebe

En el departamento...

La pequeña familia se encontraba comiendo en familia despues de un mar de emociones

—Al parecer ya tenemos otro miembro más en la familia—dijo Robert mientras miraba a Rose poniéndola un poco nerviosa

—Otra hermanita más—dijo Roland emocionado

—Si pequeño, me alegra tener un hermanito tan hermoso como tú—dijo Rose mientras abrazaba a Roland

—Haz hecho un gran trabajo Regina—dijo Elizabeth mientras la miraba—Haz criado a una buena hija

—Ha veces pienso lo contrario—dijo Regina—En algún momento me perdí en el camino pero gracias a Henry y mi amigos que los considero una familia para mi me hicieron volver aquel camino que pensé haber perdido—mientras sonreía

—Mamá, papá, Regina les tengo una sorpresa—dijo Belle mientras iba abrir la puerta del departamento en donde se encontraba Rumple con la pequeña Robyn en brazos—Logre conseguir que esta hermosa princesita regresara con su familia, aunque sea por un corto tiempo

—El tiempo que sea será la mejor—dijo Regina mientras sonreía y la cargaba con mucho amor

—Ahora que sabemos que las cosas van bien, Belle quiero que regreses a Storybroocke no quiero que estés más estresada—dijo Elizabeth mientras miraba a su hija

—Mamá yo me encuentro bien—dijo Belle pero antes de que pudiera dar un paso más tuvo un pequeño mareo que provoco que perdiera el equilibrio pero Rumple logro atraparla a tiempo

—Amor tu madre tiene razón recuerda que no solo eres tú, también nuestro pequeño siente todo esto—dijo Rumple mientras la miraba preocupado

—Pero—dijo Belle

—Es lo mejor hija además quiero que Roland se despeje de todo esto y tanto el cómo Rose no deben de faltar más a la escuela—dijo Robert

—Pero yo me quiero quedar con mamá Gina—dijo Roland haciendo un puchero

—Hey Roland yo también quiero quedarme aquí pero tenemos que hacerle caso al abuelo—dijo Rose con una sonrisa—Que te parece que cuando lleguemos a Storybrooke acampemos en el patio de la casa—mientras acariciaba su cabello

—Está bien Rose—dijo Roland con una sonrisa

—Yo me encargare de que lleguen bien a casa—dijo Rumple mientras ayudaba a sentarse a Belle—Sera mejor partir ahora

—Ven Roland te ayudare con tus maleta—dijo Rose mientras lo llevaba al cuarto

Días después...

Era día de visita en la prisión y Regina está ansiosa de que Robín viera la sorpresa que traía para él, no le habían contado nada sobre que tenían a Roín por un par de días

—Para ser que no somos las únicas ansiosas para ver a Robín—dijo Regina mientras miraba a la pequeña bebé revoloteando de felicidad

—Papá—repetía Robyn con gran felicidad cada vez que escuchaba hablar de el

—Ya quiero ver la cara de mi hijo—dijo Elizabeth mientras esperaban a Robín en el cuarto de visitas

Al llegar Robín jamás espero que su pequeña niña estuviera ahí con las dos mujeres que más amaba

—¿Cómo?—pregunto Robín mientras abrazaba a la pequeña y la llenaba de besos

—Fue gracias a Rumple, el consiguió una orden del juez para que nos dejaran ver a la pequeña—dijo Elizabeth con una gran sonrisa

—Al parecer ya le debo mucho a el—dijo Robín mientras se sentaba y acariciaba la mejilla de la pequeña—¿Cómo están los demás?

—Tu hermana y nuestros hijos regresaron a Storybrooke, no quería que Belle se estresara más con todo esto y los niños no tenían que perder más días de escuela—dijo Regina

—Por el momento es lo mejor—dijo Robín

—Robín tenemos buenos noticias tu juicio empezara en unos días y tenemos las pruebas suficientes para sacarte de este lugar—dijo Regina feliz

—Eso es música para mis oídos—dijo Robín—Mamá podrías dejarnos a solas por favor—mientras le sonreía

—Claro—dijo Elizabeth mientras se paraba e iba con su esposo y sin Regina la mirara le entrego una cajita negra a Robín

—Regina—dijo Robín mientras con una mano—Quiero hacerte una promesa—mientras le pasaba con cuidado a Robín—Quiero prometerse que después de que salgamos de todo este amargo momento, quiero que vivamos juntos como una familia—mientras se arrodillaba y abría la pequeña caja mostrando un pequeño pero lindo anillo—Sé que no es el mejor lugar para pedirte eso y el poco tiempo que llevo conociéndote sé que tú eres mi alma gemela y la mujer con la que quiero despertar cada mañana y decirle te amo—mientras colocaba el anillo sobre el dedo anular de ella—No acepto un no como respuesta—mientras reía por la expresión que había puesto Regina

—Sería una tonta si no aceptara esta oferta—dijo Regina—Sea el lugar que sea siempre y cuando tú estés a mi lado, para mi será el mejor lugar del mundo y claro que acepto esta proposición mi amado ladrón—mientras se inclinaba y lo besaba—Así que ladrón compórtate bien que queremos tenerte en casa pronto

—Lo que diga mi reina—dijo Robín mientras hacia una pequeña inclinación avergonzando a Regina un poco ya que se habían vuelto el centro de atención

—Eres un tonto—dijo Regina mientras abrazaba a Robyn para ocultar su vergüenza

—Pero este tonto te ama demasiado—dijo Robín mientras besaba la mejilla de Regina mientras escuchaba las risas de su pequeña niña—Entonces mi reina protege nuestra promesa y espera a mi regreso

—Lo hare—dijo Regina firme pero sin perder su sonrisa

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Por fin de mucho tiempo pude publicar perdón por la demora, espero que les agrade este capítulo y el juicio de Robín por fin empezara.

Outlawqueen: Las almas gemelas existen y yo soy la tuyaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora