Yo no sé si tú marcaste u antes y un después de mí. De todos los amores que yo tuve, tú fuiste el más tóxico, el que más daño me hizo. La persona que más me hizo sufrir, sentimentalmente hablando, claro, pero también sé que yo te hice el mismo, o quizá más, daño de lo que tú me llegaste a ser. No sé si porque yo era muy joven y no tenía nada de experiencia en el amor, o simplemente porque así tenía que ser. ¿Sabes? Odio cuando la gente dice "todo pasa por una razón", ¿cuál es la maldita razón en este caso?, ¿cuál es la razón del por qué te hice tanto daño? Repaso una y otra vez todos los días que viví a tu lado, o al menos los que recuerdo, y a mi mente vienen momentos muy buenos, pero también muy malos. Momentos en donde yo me sentí verdaderamente feliz pero otros en donde me sentí la peor basura y quise morir. Sabía que tu amor me terminaría matando, que era la peor droga que podía consumir, pero aun así no quería dejarte, quería seguir junto a ti, prefería morir amándote a vivir lejos de ti. Tú también lo sabías, sabías que nuestro amor, si así podemos llamarlo, era tóxico, era dañino, era terrible, vil, y otras cosas feas más. Pero tú fuiste más valiente que yo (aunque realmente no sé si te alejaste por valentía, por amor o porque simplemente ya no dabas más, eso solo lo sabes tú y esa verdad morirá contigo) y te alejaste, me dejaste ir, dejaste ir a la persona que más amabas –según tú- que era también quien más te hacía daño –y esto no es solo según tú, también lo sé yo y todas las personas que estuvieron metidas en nuestra relación. Te fuiste y me destruiste, te fuiste y yo morí, te fuiste y una parte de mí se fue contigo. Jamás regresaste, ni por error, ni siquiera poniendo de excusa al alcohol. Te marchaste y tu peor venganza por todo el daño que te hice fue jamás volver a mí. Y te felicito, te salió muy bien, tu venganza es la única que me hizo daño y me hizo llorar. Y ahora, tanto tiempo después, luego de haberte superado (o de haber superado el sufrimiento que tu amor y tu adiós me causaron) vuelves a mí en forma de recuerdo, y una vez más me odio y siento un vacío por dentro. Un vacío que quizás solo tú podrías llenar.
