d i e c i s é i s

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Querido Rudy:

Anoche Frau Hermann y su marido me llevaron a cenar a un restaurante bastante fino para mi gusto; hoy es mi cumpleaños y quisieron darme un pequeño detalle. Realmente siento yo que fue un gran regalo y que no debieron haberse molestado con tanto, pues recuerdo que el día de mi cumpleaños número catorce mis padres me regalaron libros y la verdad creo que con eso me hubiera bastado.

Pero en fin, ¿quién no aceptaría ir a un sitio así? ¡Es la mejor comida del mundo, Rudy!

Aunque creo que te hubieras desmayado al ver los precios, pero eso no importa porque tu estómago estaría tan satisfecho que después no podrías pensar en nada más.

Tal vez algún día vas a saber exactamente de lo que te estoy hablando, porque yo estaré ahí para contarte todo con lujo de detalle.

Tengo una vaga esperanza de que nos vamos a volver a ver, Saukerl, y eso es algo que nadie me puede quitar.

Tuya, Liesel.

Cartas a Rudy [#AAwards].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora