Última ilusión

Adiós

Se acercó a mi y me besó, nuestro último beso fue uno de esos instantes infinitos estratégicamente improvisados.

Luego de un rato ya, separó sus labios y con mas lágrimas en los ojos, sonrió.

«Yo también siento algo muy fuerte por ti, y espero que te lleves este sentimiento contigo, porque nunca acabará» dijo finalmente

Me dió un beso en la mejilla.

Se levantó y se secó las lágrimas que le caían.

Dejó las rosas en mi mesita de noche de la clínica, cogió su chaqueta de la silla, que nunca me fijé que dejó, y abrió la puerta.

«Te espero allá» sonreí y me despedí con la mano sin levantar el brazo.

«Espero verte pronto con una sonrisa, te quiero»

Le regalé una última sonrisa, y cerró la puerta.

Yo sabía que sería la última vez que nos veríamos.

Él también lo sabía.