Jung Ho Seok

Capítulo 1

Holaaaaa, volvimos como verán con
está es una nueva historia en compensación a la atención que le dieron a "Park Ji Min" <3

Esperamos que les guste y den el mismo amor que a "Park Ji Min" por favor :3

Para saber su opinión voten y comenten por favor *-*

Los amamos demasiado ❤ mis lectores y lectoras no lo olviden °^°

Perdón por las fallas ortográficas
°~°

Sin más preámbulos, disfruten ~

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– Mañana ya es tu primer día de clases, ¿Estás emocionada? - dijo tendiendo la ropa.

Mamá siempre es así me llama por cosas innecesarias.

Solté un suspiro.

– Sí aunque.....también estoy un poco nerviosa – no es que sea mi primera vez en una academia, pero estamos en otro país y no sé cómo me tratarán.

– No estés nerviosa hija, tú siempre has hecho amigos fácilmente así que no creo que te vaya mal - dice reconfortante.

– Tienes razón – dije alegre – daré lo mejor de mi mañana.

Entramos a casa y empezamos a comer, terminamos y fui directo a mi habitación a empacar mis cosas.

Toc toc – tocan la puerta- adelante.

– ¿Ya terminaste de empacar?- la escuché decir.

– Sí, ya termine – no tenía mucho que empacar así que termine rápido.

– Está bien, salimos a las 8- sonrió.

Ya quiero estar allí, para conocer más.

Sonreí inconscientemente.

Verifiqué en todo mi cuarto para ver si había olvidado algo hasta que encontré tal cadena que había echo para el. Pero la rechazó.. ¿Qué buena es la vida no?

Él era la única persona en quien confiaba, sigo sin entender ¿Por
qué me abandonó?

Por tan solo una simple confesión..

– Hija, ¿Ya? El taxi nos está esperando para llevarnos al aeropuerto - las palabras de mi madre me sacaron de mis pensamientos

– Ah...si, ya estoy lista – dije sonriendo- vamos

Salí de casa directo al aeropuerto.

Llegamos, hice mis trámites y ya era hora te partir.

– ____ , me llamas- me sonrió melancólica- que te vaya bien.

– Me acerqué y le dí un abrazo – no te preocupes te llamaré apenas llegue – me alejé un poco y le sonreí – bueno ya me tengo que ir.

Estaba ansiosa por ya ir.

Me despedí nuevamente y tome mi avión rumbo a corea.

Me tocó sentarme al lado de la ventana, le tenía miedo a las alturas, pero de cierta manera estaba calmada