Capítulo 2.

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El lugar donde se realizan las peleas era aterrador, era una especie de edificio abandonado rodeado de personas borrachas y unas cuantas prostitutas con sus presas de la noche.

-¿Me puedo arrepentir?- digo interrumpiendo a la linda parejita que lo único que hacían era ignorarme, lo cual era incómodo, era una especie de violín en la velada.

-No, solo será un rato pequeño- Sam sonrió en mi dirección y le regale una linda sonrisa falsa que ella noto para hacer una mueca.

-Bien, no se separen de mi, veremos la pelea de mi amigo y nos iremos ¿Esta bien?- nos mira a ambas y asentimos con nuestra cabeza.

Empezamos a caminar hacia el edificio donde pasamos por medio de un pasillo demasiado pequeño y que no tenía un buen olor, su olor lo podría considerar como orines, si orines, lo cual me llevaba a pensar en si las personas no conocían un lugar llamado baño, al terminar de caminar por ese pequeño pasillo llegamos a un salón grande repleto de personas las cuales gritaban eufóricas por la pelea.

-¿Algo de tomar?- pregunto Rick a Sam y a mí.

-Yo agua- respondí, no tomaría otra cosa este lugar no era el más adecuado como para terminar borracha o en otras condiciones.

-Cerveza- dijo Sam alzando sus hombros gesto el cual hizo que Rick sonriera.

-Aquí tienen bellas damas- nos entrego a cada una lo que pedimos y nos empezó a llevar a unos asientos que habían cerca del ring, se podrían considerar como la zona V.I.P o algo parecido.

-Jamás me dejaré volver a chantajear por ti- digo a Sam mientras bebo un poco de agua.

-Sabes que volverá a suceder- hago una mueca por que es simplemente la verdad, siempre consigue convencerme.

Me callo y miro todo a mi alrededor con curiosidad, ¿En realidad la policía nunca a descubierto está payasada? Bueno realmente esa era mi opinión creo que está no era una manera adecuada para divertirse, un hombre de avanzada edad con una gran panza y dientes amarillentos se subió al ring por lo que todo el lugar quedó en completo silencio.

-Desde este momento las apuestas quedan cerrada, y sean bienvenidos a una nueva pelea- dice causando gritos alrededor- Bien, por un lado tenemos a la bola demoledora- dice alargando el final de cada palabra, pero al decir ese apodo se escuchan abucheos por todas partes- Y por el otro tenemos a él diablo- dijo emocionado de ver a la gente gritando por el supuesto diablo- Ahora si, que empiece la pelea- a penas termino salieron los dos luchadores de la noche.

Mientras uno de los luchadores era extremadamente guapo el otro era realmente repugnante, aún que el que era repugnante le ganaba de tamaño al otro y para mí ese era el que iba a ganar.

Ambos luchadores, se posicionarnos uno frente al otro y el repugnante lanzó el primer golpe que dió directo a la cara del otro chico, el golpe que recibió pareció despertarlo por que en sus ojos se pudo notar la furia que sintió y de un solo golpe hizo perder el equilibrio al otro aprovechando ese momento para lanzar varios golpes al rostro del sujeto y la sangre empezó a salir del rostro, sentí que varias gotas callera en mi cara lo cual ocasionó un poco de asco pero no me limpie por que estaba concentrada viendo como el chico que era guapo había derrotado a su contricante dejándolo realmente moribundo, las personas al notar que el había ganado empezaron a gritar fuertemente y varias bragas caían en el ring lo cual hizo que mirara sorprendida la escena para empezar a limpiar aquellas gotas de sangre que habían caído sobre mi cara.

-Bien, levántense ahora- dijo tomando  las manos a las dos y llevándonos a un lugar apartado, apenas llegamos al lugar apartado el luchador que ganó fue rodeado por las que suponía y eran sus admiradoras.

Rick nos hizo una seña que daba a entender que lo siguieramos, llegamos  a un lugar que estaba lleno de puertas y entramos en la que decía Black, era una especie de camerino y debía admitir que era lo más decente que había en el lugar, claro si evitamos a la cucaracha que había pasado rápidamente.

-¿Fui la única que noto la cucaracha? - dijo Sam horrorizada, ya que le tenía una pequeña fobia a esos animales.

-Pasen, una cucaracha no le hará daño a nadie- pase y me senté en un sofá y a mí lado se sentó Sam seguida de Rick.

-Las cucarachas te comerán- digo en susurro a Sam, la cual me mira asustada y al ver mi cara burlona me da un pequeño golpe.

-No juegues con eso- me fulminando con la mirada para empezar a besar la mejilla de Rick.

Algunas veces deseaba tirar a todas la parejas  a un barril tóxico a ver si se les quitaba lo cariñosos que eran, claro que tuve relaciones amorosas pero en ninguna me comportaba tan tierna ya que era algo que me fastidiaba totalmente y creo que por esa razón me terminaban, ellos querían que les rogará o que fuera tierna pero era algo imposible en mi.

La puerta se abre ruidosamente sacándome de mis pensamientos y por esta entrada nada más y nada menos que el ganador de la pelea de esta noche.

-Chicas les presento a mi amigo Black Smith- el mencionado solo nos mira de arriba abajo para pasar de nosotras y encerrarse en otra puerta que había en la habitación que estábamos.

-Que sujeto tan agradable- digo haciendo que todos nos miremos y riamos.



Black.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora