Amor En Juego

Capitulo 2

Un extenso y fatigoso mes había transcurrido. El vacío que se sentó en mi corazón era indescriptible. Kris dejo de hablarme en todo ese tiempo, en ocasiones cruzamos camino en el estacionamiento mas no me hablo, siguió su camino y ahí estaba yo, preguntándome lo que había echo mal ¿Qué razón había detrás de su alejamiento? Una razón que me iba consumiendo, el corazón dolía, mi voz interior estaba sentada con los brazos cruzados, la cara enfurecida y yo también le hacía compañía.

—Tengo hambre ¿Tú? —Brandon ofrece su brazo y paso delicadamente mis finos dedos. Lo único delgado de mi cuerpo.

Brandon ha sido mi apoyo inconsciente, con él, el dolor se esfumaba momentáneamente, ese vacio que iba creciendo de manera descomunal. Steph se cuestionó el comportamiento de Kris, y sin dudarlo le dije que no sabía. Lo cual era cierto, en el pasado habíamos tenido pelas, incluso aún más graves y nunca habíamos dejado de hablar, así que su repentino cambio de humor me era extraño.

—No, desayuné en la mañana —Vamos bajando las escaleras. Me había pedido que lo acompañara a comprar su almuerzo.

—De acuerdo Asiente. —En el camino hablamos de las clases, de nuestros gustos en común como por ejemplo, el béisbol. Brandon es de Chicago Illinois, de la ciudad natal de mi equipo favorito, Cubs.

Regresamos con frituras y refresco en las manos de Brandon. Se ofreció a comprarme algo lo cual decline.

—¿Me acompañas al auto? Iré a sacar la tarea del profesor de Microbiología
—Asiente. Ya que sigue masticando sus frituras.

—¿Cuál es tu auto? —Señaló el Audi azul que esta en el estacionamiento.
—¿Ese es tu auto? —La emoción envuelve su voz, y sus ojos azules se entrevé el asombro. Asiento— No puede ser, la primera vez que lo vi me enamoré, hasta se lo dije a Colton, morirá cuando se entere —Sus manos grandes y gruesas recorren cada centímetro de la puerta del conductor.

—¿Corre rápido? —Suelto una carcajada amarga.

—La pregunta ofende, claro que corre rápido —Cierro la puerta del copiloto. Mientras avanzamos de nuevo a la universidad.

—¿Qué modelo es? —Puedo ver diversión en sus ojos, la misma que tengo yo al ver un auto hermoso —Audi Rs7 —Decir el modelo de mi auto, llena de satisfacción cada rincón del cuerpo. Suena algo ostentoso y lo es. Los autos son mi pasión y debía tener el que más me gustara con la suficiente potencia y a la vez un confort cómodo al manejar de diario.

—¿Qué tan rápido? —Brandon se planta en frente de mi. La sonrisita involuntaria y hermosa surca sus facciones tan duras, dondole cierto aire atractivo. Más de una había volteado a verlo, su grande cuerpo llamaba la atención, y ni hablar de sus trasero, la verdad lo envidiaba, yo quisiera tenerlo así.

—Lo suficiente ¿Por qué? —Regreso al planeta tierra, y sus ojos azules me atrapan. Puedo entre ver algo de timidez en su lugar.

—No, olvidalo —
La sonrisa de su rostro ha desaparecido.

—Brandon... —Alzo una ceja exigiéndole que me lo cuente. Soy demasiado terca y lo conseguiré.

—Quería saber si tu... —Se rasca la nuca dejado ver su brazo musculoso— No, en serio olvidalo.

—Por supuesto —Le doy un codazo en la parte lateral de su estómago— Un día vamos a correr a mi bebé —Guiño el ojo. Sus brazos rodean mi cuerpo. El aroma que emana es realmente exquisito, embriagador.

—Eres la mejor —Sostiene mi rostro en sus manos grandes y deposita un sonoro beso en cada una de mis mejillas. Una risa involuntaria sale de mi boca.