I

379 63 28
                                    

     Ambos eran ciegos, ciegos intentando ocultar lo evidente, el sentimiento que sentían en su ser cuando se encontraban cerca el uno del otro. Evitaban pensar del por qué de sus mejillas sonrosadas, del cosquilleo en sus manos tras los roces inconscientes, o cómo fue que la sonrisa ajena se había convertido en algo esencial de observar todos los días, y de cómo los ojos ajenos podía brillar como la mismísima Luna.

     Y encontraron las respuestas a sus dudas. O mejor dicho: la encontraron. «Amor».

     JaeBum dudó. Se negó a esa conclusión. Se lamentó de gustar de un hombre. Y lloró. Lloró lamentándose de las respuestas y reacciones anticipadas de lo que su círculo de amigos, familia y conocidos tendrían, se lamentó de fallarles, pero principalmente se lamentó de fallarles a las (os) Ahgase, considerándose el peor líder. Pero lamentarse de todo no serviría, y lo supo al percatarse de que cada día de sollozos e hipidos no sólo lo dañaban a él, sino también dañarían a sus compañeros. Sintió su corazón estrujarse al ver a Jackson preocuparse, pasando sus manos cálidas en su ser frío y azul, trató de emitir un "Estoy bien", pero de su boca salió un sonido lastimero y todo él se derrumbó de nuevo. Pero no sólo él se derrumbó, Jackson igual lo hizo.

     "Está bien, Hyung.", escuchó sintiendo la calidez del rubio, "Estoy aquí, desahógate.", sabía que Jackson era demasiado sensible así como empático, pero verlo mordiendo de su labio inferior intentando vagamente contener sus lágrimas; lo sorprendió. Y se reprendió al ver como una lágrima se deslizaba por la mejilla ajena, se permitió deshacerse de aquél lagrimal, y así mismo se permitió sonreír al sentir la piel suave del menor.

     "Te ves feo llorando, Jackson.", rio con un aire de amargura pensando que era él quien se veía feo, pero necesitaba calmar la atmósfera, no se permitiría dejar a Jackson llorando por su estúpido estado de ánimo, ni tampoco hacerle sentir miserable, así que lo observó, como Sirios miraría a la Luna, se concedió el honor de verlo como una obra de arte (y es que lo es para Im), lo vio con todo el mar de sentimientos que sentía por él, "Simplemente no lo hagas."

     Y poco le importo si no obtendría el apoyo de alguien si lo necesitaba; tendría a Jackson. Él sería su hogar, su musa, su todo. Dolería ser rechazado, pero más le dolería dejar al rubio y en algún futuro preguntarse "¿Qué habría pasado si...?", no se permitiría dejar a alguien tan eclipsante como el rapero. No desistiría, porque conoció a través del sufrimiento algo que atesoraría toda su vida.

     Y cambiaron. Jaebum y Jackson cambiaron, se podría decir que gran parte de ellos cambió, mas su amor recíproco no, sólo se transformó en el sentimiento más puro, fuerte y sincero que hayan jamás sentido. La devoción se apoderó de sus almas, clamando estas de más cercanía, toques sinceros, castos y llenos de sentimientos, sintiendo la necesidad a flor de piel de sentir los toques ajenos, sus cuerpos se acercaban impredeciblemente y con el espíritu nulo por detenerse.

     Se querían, pero no de la manera en que se puede querer a un compañero. Se querían y se necesitaban como algo más. Lo sabían y no iban a detenerse, se estaban relativizando pero sus toques no disminuirían, toques inconscientes que, en algún momento a otro, se convirtieron en furtivos. Y es que cuando nadie está mirando, ellos se pierden en las galaxias de los ojos impropios, cayendo en gravedad cero, siendo ajenos al mundo. Porque cuando nadie está observando, ellos son quiénes son: dos personas enamoradas, amándose y viviendo su romance sólo para ellos mismos. 

Cuando nadie está mirando ━ Jaeson ; Jackbum.Where stories live. Discover now