La Regla No Escrita {Justin y Tu} (ADAPTADA)

Capitulo 7

Tomo el camino largo a casa porque no quiero estar pensando en Justin y Emily cuando llegue allí. No quiero jugar al y si… como vengo haciendo más de la mitad de las veces. Quiero estar feliz por Emily y nada más. Pero cuando llego a casa, el coche de Justin está en la entrada.Me detengo junto a él, mi estómago retorciéndose mientras mi corazón (estúpido, traidor) se agita en mi pecho, haciéndome marear.Miro al pórtico y veo sentados allí a mi padre, a Emily y a Justin.Miro a Justin y Emily (me hice a mí misma verlos) y mi corazón dejó de revolotear porque es así como son las cosas. Ésta es la realidad. ¿Pero por qué están aquí? 

—Hola, ____ Bear —dijo mi padre, levantándose y abrazándome como si tuviera seis y no diecisiete. Suspiro pero le devuelvo el abrazo, contenta de que él no se estremezca por su cadera mala.

 — ¿Por qué están en el pórtico? —le pregunto, y después miro a Emily.

- ¿Y cómo hiciste para llegar antes que yo?.

Emily pone sus ojos en blanco.—Conduces como un anciano, _____—ella mira a mi padre—. Sin ofender, Sr._____

—De ninguna manera —dice, y despeina su pelo. Odio cuando me lo hace a mí, porque me recuerda que mi pelo no es tan brillante ni se ve tan bien, sino que parece como si alguien lo hubiera despeinado todo el tiempo. A Emily le gusta (aunque siempre lo tenga) y lo corta con una sonrisa tímida antes de girarse a Justin y curvar un brazo alrededor de sus hombros. 

—De todos modos —dice ella—. Estamos aquí para secuestrarte. Es viernes por la noche y mi mejor amiga no puede estar sentada sola en casa. Es decir, ¡lo haces todo el tiempo!

—_____ Bear, no tienes que quedarte en casa hasta la una, ¿sabes?, y además, no hay necesidad de perder el tiempo en casa esta noche —él me sonríe—.

—¿Cómo está tu cadera?

 —Todavía conectada a mi cuerpo —dice con una sonrisa, y bajo la mirada a las zapatillas que estoy usando porque sé que está sufriendo y deseo que haya algo que pueda hacer. Por él. Pero no puedo.—Entonces —dijo Emily, ondeando una mano frente a mis ojos.

- Como dije, te estamos secuestrando. ¡Justin, rápido, agárrala y vamos!.

Me muevo, levantándome así Justin no sentirá como que tiene que tocarme. Trato de no mirarlo mientras lo hago, pero no puedo evitarlo y veo que él me está mirando. Trago y mi padre ríe, dice: —_____ Bear, no creo que Justin te haga daño. De hecho, no estoy seguro de que él pueda levantarte. —Gracias, papá —dije, y él sacudió su cabeza y dijo: 

—Oh, no, no, no quería decir... bueno, eres delgada. _____ Bear. Lo sabes. Quiero decir que Justin es muy grande... no que no seas capaz, estoy seguro, Justin. Pero no pareces como el tipo que corre para alcanzar —se limpió la garganta.

-Bueno ¿por qué no entro y veo si tu madre necesita ayuda?

 —Papá —dije, medio avergonzada, medio preocupada por él, pero cuando fui a abrirle la puerta, me sacudió la cabeza y dijo: 

—Anda, ve, diviértete.

—Asegúrese de tomar las pastillas —dijo Emily, y mi padre sonrió y dijo:—Sí, de verdad tomaré mi medicina —y rizó su cabello antes de entrar. —Él es lindo —dijo Emily, y tomó mi mano.

-Ahora ven, _____ Bear, trae tu pequeño trasero al juego.

 —No soy pequeña —dije, mirando a Emily cuando me empujaba hacia el coche de Justi .

-Tengo... huesos pequeños.

—Eres pequeñita —dijo Justin atras de mí, y Emily dijo:

—Por lo cual deberías conseguir un nuevo coche. Quiero decir, _____ todavía no ocupa toda la habitación —me sonrió mientras me metía en el asiento trasero—.

—Sí, la capitana Tiny está a la deriva para volver —dije mientras me ponía el cinturón de seguridad. 

—¿Qué, no más chica a bordo? —dijo a Justin, su sonrisa desapareció antes de meterse en el asiento delantero, y sé que él estaba pensando en el viaje de clase que tomamos el año pasado, cuando los dos nos mareamos y fuimos (y volvimos) al carril de la miseria compartida. Me sonrojé, con satisfacción y miedo. 

—Ustedes dos están raros —dijo Emily —, pero aún me agradan. —Gracias —dijimos Justin y yo al mismo tiempo, y Emily se rió y empezó a besar el cuello de Justin.—Está bien, bien, sepárate de mí —dijo Emily después de un momento. 

—Yo no... estoy conduciendo —dijo Justin.

— ¿No puedes tomarte un segundo y besarme?

—No, quiero decir, yo... estoy conduciendo y este coche es, ya sabes.

Miré a mis manos. Tanto como no me gustara andar cerca con Justin y Emily cuando se estaban besando, esto era mucho peor. Y la realidad es que estos momentos tensos son más comunes que los besos, han sido por mucho tiempo de hecho.

—Ok, estás conduciendo —dijo Emily, y escuché lo mucho que se esforzaba por sonar feliz.

-¿Puedes pensar por lo menos en pedirme uno mejor? 

—Me gusta mi coche.

—No es tuyo. 

—Es mío._____ ni siquiera tiene un coche, entonces el coche no puede ser quien eres —dijo Emily.

-¿Cierto, _____?

—Yo... bueno, se supone que mi madre lo está consiguiendo en algún lado —dije, con la tensión que sentía, y eso en el coche me comía por dentro—, pero entonces eso haría que esté naranja y dentada.Entonces no lo sé.

Encontró una canción que le gustaba y la subió tan alto que las ventanas del coche prácticamente estaban vibrando. Tan fuerte que nadie podía decir nada. 

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Melissa*