1 (En futuro)
Manos sobre la cama apretando las sabanas, sonidos llenos de placer envolviendo la habitación que era cubierta por la oscuridad de la noche, un pequeño quejido se escuchó entre las sabanas de una enorme cama circular la cual era envuelta por cortinas azules las cuales solo dejaban ver sombras traviesas acariciándose unas a otras jugueteando entre la poca luz que las estrellas y la luna filtraban por las cortinas.
Dos amantes que jugaban a ser niños, dos amantes que se prometían crecer uno junto al otro, dos amantes que soñaban con un día escapar lejos y construir un castillo lleno de sueños.
—Te lo prometo...—Un suspiro lleno de lujuria salió de entre los labios de uno de los dos amantes. —Te prometo que tendremos...un final feliz
Una risita juguetona se escuchó en el cuarto seguido de un gemido y un leve gruñido —Solo promete llevarme a un campo de flores ¿Si?
— ¡Oh! — Una pausa dejo a ambos en silencio, se miraron a los ojos y sonrieron al entenderse perfectamente. —Lo prometo.
2 (presente)
El grito desgarrador de un joven chico de solo catorce años se escuchó por toda la habitación la cual era de un color dorado y estaba adornada con diversos juguetes para niños de unos cinco años o más. Un segundo grito causo que una de las sirvientas del castillo al pasar por el pasillo se quedara intrigada por el desgarrador sonido.
— ¡No! —Grito un pequeño niño de piel pálida y cabello castaño que se encontraba totalmente desnudo y boca abajo con la cadera levemente alzada mostrando sus pequeños glúteos al hombre que se encontraba detrás de él.
La sonrisa del viejo rey se dibujó casi de oreja a oreja como la de un llena lista para devorar a su presa, sus manos subieron por los pequeños glúteos que eran cubiertos por completo por sus palmas un dedo de su mano derecha se metió sin piedad en la entrada del joven niño que había sido dilatado mucho antes. —Estamos jugando ¿No te gusta? Siempre juego así con tus hermanos. ¿Ellos jamás te hablaron de esto?
"No" pensó el joven castaño que solo podía gemir y gritar por lo que su cuerpo estaba sintiendo. Era tan confuso para el sentir un enorme placer recorrer su pobre cuerpo en celo y por otro lado sentir un asco enorme al ser tocado por alguien a quien no amaba, su mente gritaba que lo alejara pero su cuerpo parecía no cooperar por culpa de su primer celo—Arañas... —murmuro al sentir esa extraña sensación de escalofrió por todo su cuerpo que al mismo tiempo le daba asco pero disfrutaba.
3
Sobre el campo donde los caballos paseaban se veía un pobre chico rubio correr detrás de un caballo de color negro bastante maduro y rebelde como para ser sometido. Cualquiera que viera esa escena tan rara fácilmente deduciría que el caballo era mucho más listo que el pobre rubio que apenas y podía con su alma. —Efectivamente necesita modales...— SooHyuk suspiro miro a todos lados y camino directo al pobre Wolfgang dejando de lado su lectura por unos momentos.
— ¡Carajo! — Wolfgang se dijo así mismo totalmente cansado y derrotado sobre un pobre asiento de madera, miro al techo y soplo un poco moviendo su cabello que escurría sobre su rostro sudado. "Debo tener el mejor caballo" pensó inquieto y miro aquel caballo negro relinchar lejos, frunció el ceño y lo señalo como retándolo a un duelo aquel animal que ahora corría lejos — ¡Ganaste solo esta vez!
—Yo diría que ha ganado más de unas diez veces ¿Oh me equivoco joven?
La sonrisa encantadora de Wolfgang se dibujó en su joven rostro mostrando sus hoyuelos — ¡Hey conejito!
— ¿Conejito? —SooHyuk pregunto con los ojos bien abiertos y con la ceja arqueada para así bajar la mirada y peinar su cabello detrás de su oreja. —Bueno este conejo siente curiosidad por lo que el joven príncipe está haciendo y sobre todo me da curiosidad el atuendo que trae puesto.
Wolfgang miro su ropa y se sacudió el polvo para pensar un poco, se cruzó de brazos y miro aquel chico frente a él, abrió la boca y cerro de golpe pensando muy bien lo que diría. —Esta ropa es de sobrevivientes.
— ¿Sobrevivientes? — pregunto curioso SooHyuk al escuchar su respuesta.
Wolfgang asintió con un orgullo en su mirar para así escuchar su estómago rugir y ponerse totalmente rojo del rostro pues no había comido nada desde hace un dia —debo irme tengo que comer.
— ¡Oh! si — Respondió SooHyuk con un tono burlón — hablas de meterte a la cocina como un ladrón a robar una manzana, escuche que hace un día el príncipe forastero había entrado a la cocina a robar comida. Propio de la familia real —Resoplo y sonrió al ver que había acorralado al rubio —Hagamos un trato ¿Si?
— ¿Qué? —Pregunto curioso mirando a su alrededor — ¿Crees que me convencerás en entrar a vivir al castillo y ser un idiota más de los que le besan los pies a mi padre ¿Se trata de eso? —Pregunto curioso Wolfgang pues en los últimos días el personal del castillo había ido detrás de el con diferentes formas de chantaje. —Comida, agua, cama, dinero, joyas... ¡Incluso mujeres! —Insistió molesto al recordar todo lo que le habían ofrecido con tal de que aceptara su papel como príncipe. —Yo no soy como mis hermanos...inclusive uno de ellos tiene una novia de otro reino, que pérdida de tiempo.
—Es chico no una chica, la pareja del tercer príncipe— dijo SooHyuk con calma al escuchar todo lo que decía el príncipe— ¿Alguno de ellos te ofreció venganza? —Pregunto con serenidad apretando el libro que traía entre sus manos—Puedo ayudarte...si tú me ayudas.
— ¿En qué te ayuda todo esto? — Pregunto Wolfgang curioso al escuchar lo último.
—Podría salvarme la vida...y asegurarme el no terminar siendo tu padrastro o madrastra como lo quieras ver.
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El rey sin corona
RomanceDespués de la muerte de su madre, Wolfgang abandono su hogar termino por vivir entre las calles. Ahora tenia una nueva familia, niños en su misma situación, apoyándose en aquel entorno en donde era más seguro vivir unidos. La vida fuera era dura, la...