capíтυlo 1.

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La verdad es que Seungkwan tenía claras muchas cosas, lograba entender a la perfección los enunciados que le daba la vida. Analizaba, comprendía y resolvía con destreza sus problemas.
Pero había una 'cosa', un enunciado, un problema que Seungkwan no podía resolver, éste tenía nombre y apellido, más específicos, Hansol Vernon Chwe.

Ese muchacho de cabellos castaños y sonrisa encantadora, con rasgos delicados de la perfecta combinación americano-asiático, y se rumoreaba en los pasillos que era el hijo perdido del actor Leonardo Di Caprio. Vernon traía de los nervios a el pobre Seungkwan, le perseguía de aquí a allá, era su sombra y aquello al menor le molestaba, por que había algo que el mayor no se cansaba de repetirle;

—Soy perfecto para ti, Boo. —

Ahí estaba esa voz nuevamente, la cual le parecía tan varonil y a la vez irritante, le daban ganas de darle un puñetazo en ese rostro bonito, pero no... Seungkwan es un buen chico.

—Ya basta con eso, Hansol.— El más bajo rodó sus ojos con un suspiro.

—Lo sé, Boo, estoy seguro. Somos el uno para el otro.— Sonrió con satisfacción acariciándole la mejilla que ahora se encontraba sonrojada.

—S-solo... Eres un idiota, Chwe.— Sonrojado, con su cabeza agachada y el labio inferior atrapado entre sus blancos dientes. —Ya debo irme.— Se apresuró a escapar siendo un manojo de nervios, su respiración agitada y con el corazón apunto de salir de su pecho.

—Eres tan tierno, Boo... Perfecto para mí.— Susurró más para si mismos que para el muchacho que acababa de huir, una sonrisa bobamente enamorada se posó en sus finos labios y se sobresaltó cuando la mano de alguien desconocido palmeó su hombro tarareando en negación. Miró sobre su hombro y rió al ver a su gran amigo Kim Mingyu.

—Eres un caso perdido, Vernon. ¿Cuando se te pasará el capricho con Kwan?—

—La verdad, Min, creo que luego de un año diciéndole que somos perfectos juntos, almas gemelas, dudo que sea un capricho.— Suspiró caminando a la salida junto con el más alto. —Estoy enamorado, Mingyu.—

perғecт. -verĸwan-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora