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capítulo 1

Encontrándose de Nuevo

Esto sucedió en el año en que Atena nació. El verano en Grecia tuvo una ligera llovizna, normalmente llovía uno o dos días en un mes. Más allá de las montañas de Atenas, donde esta construido el Santuario, también el clima es muy seco, y ese calor seca las montañas de barro, lo que hace que el viento forme mucho polvo. A la ciudad llegan grandes cantidades de turistas, muy curiosos.

Desde la época del mito ha sido de esta manera, la ciudad ha atraído a muchas personas en busca del misterioso lugar. Cada cierto tiempo, un reportero intenta buscar este místico lugar llamado Santuario, pero vuelve sin recompensa. La verdad es que el Patriarca para evitar que el Santuario sea invadido ha creado varios campos de energía al rededor del Santuario gracias a su poderoso cosmo

Este misterioso lugar provoca un arco iris al cual la gente normal llama "el arco iris de Dios". Aunque desde tiempos ancestrales la gente ha pensado en el Santuario como un lugar extraño siguen teniendo un buen presentimiento acerca de ello

Un joven como el viento, ha entrado fácilmente al Santuario. A la luz del sol, el viento movía su cabello como si tuviese vida propia, sus ojos no reflejaban su verdadera edad. Por su aspecto y sus ropas, él no puede ser nadie más que un Santo.

"Mi antiguo hogar, el Santuario... No ha cambiado nada"

El joven logra ver en el centro del Santuario el reloj de Fuego que está ubicado justo en frente de los doce templos donde se supone hay un santo de Oro protegiendo cada uno, ese lugar es conocido como las Doce Casas, el cual también está relacionado con las constelaciones de cada uno de los santos de Oro

"La décima casa es Capricornio", se dice a sí mismo pensando en tiempos pasados

El joven dirige su mirada hacia los Aposentos del Patriarca y la estatua de Atenas recuerda cuando aún era aprendiz de santo, ese lugar es donde el dio su sudor y sangre durante su entrenamiento, y más allá, estaba la arena de lucha. El joven camina hacia la arena, hace dos años, en este mismo lugar el obtuvo el grado de Santo, recibió su Armadura después de derrotar al último aprendiz

Él recuerda todo esto perfectamente ya que fue el ganador.

"En ese tiempo tuve mucha suerte... Pero si esto sucediera de nuevo, ahora, ganaría por mi fuerza" piensa el joven. Confesión verídica ya que desde hace dos años, ha estado entrenando duramente en las montañas de España. Después toma una gran cantidad de aire y lo sostiene, se concentra y cierra sus ojos, para luego liberar el aire y normalizar su respiración

Después de todo esto, comienza a surgir de su cuerpo un cosmo que emerge tan rápido como el hielo se convierte en agua, como los caballos corren en una carrera. Todo ese cosmo es expulsado de repente. El joven habré sus ojos lentamente y escoge como blanco, el pico de una montaña que esta mas allá de la Estatua de Atena por lo menos a 3,000 metros de distancia...

"Oah..." en un instante dirige su brazo derecho a la cima de esa montaña y el poder de un soplo corta el aire, esto crea un ruido volando a la velocidad de la luz. El nivel del cosmo lanzado no disminuye, hasta que golpea el lugar... A lo lejos puede verse el polvo y humo emerger del lugar. El joven, después de ver esto, presiente algo maligno hasta que detrás de él, un poderoso cosmo aparece, por lo que se vuelve con una sonrisa en el rostro y encuentra al Santo de Sagitario Aioros, sonriendo como muestra de afecto

"Aioros"
"Shura! ¿Cuando regresaste?" El joven llamado Shura no responde, en lugar de ello abraza a Aioros y este lo abraza también a la par que dice "Shura, has incrementado tu cosmo ¿no es así?"
"Aun así no puedo compararme contigo Aioros"
"Te equivocas, tal vez hallas alcanzado el mismo nivel que yo"
"El mismo nivel que tu..." Shura finalmente muestra su edad, sonriendo
"En las Doce Casas, el décimo templo, protegiendo el Templo de Capricornio, el Santo de Oro Shura de Capricornio finalmente ha regresado a casa, felicidades Shura"

Aioros extiende su mano

"Gracias Aioros" Shura estrecha su mano con Aioros en agradecimiento

Aioros siente diferente la mano de Shura debido al duro entrenamiento, su mano es tan solida como el acero y piensa "No puedo creer que halla llegado hasta este nivel... Excelente Shura..."

"Aioros, ¿que sucede?..." Aioros despierta de sus pensamientos
"Shura, el templo de Capricornio esta perfectamente ahora"

Aioros ve a Shura como su propio hermano, por lo que le dijo le llena de alegría ya que siempre lo ha visto como un ejemplo a seguir (su meta es ser como el) sin importar lo que le cueste

"Shura, ahora he olvidado por completo que eres cuatro años mas joven que yo. Ven, vamos a visitar al Patriarca. Esta noche tendremos una larga conversación"

Shura sonríe realmente feliz, porque ha obtenido el reconocimiento del santo de Oro de Sagitario