Again

Capítulo 5.

—¿Trajiste las linternas?.—pregunté.

—S-si.—dijo y sacó con torpeza dos linternas de su mochila.

Las encendimos, alumbramos hacia dentro de la alcantarilla, pero no había nada.
Miramos hacia abajo y lo único que podíamos ver eran aguas sucias, basura y rocas.

—Susan...

—Billy...

Levantamos la mirada y nos encontramos con dos niños. Uno tenía un impermeable amarillo y le faltaba una manga, y un brazo. El otro, que parecía ser una niña, tenia una camiseta rosa, a la cual le faltaba una extremidad y una manga al igual que la vestimenta del niño, con unos pantalones manchados con sangre.

Los miramos, no giré mi vista para ver a Bill, pero seguramente al igual que yo, comenzó a derramar lágrimas.
Esos niños eran Beth y por lo que he oído, el niño era George Denbrough.

—¿Por qué nos dejaron?—dijeron al unisono. De nosotros no podían salir palabras de nuestra boca.—¿volveremos a casa?

—¿Por qué no me buscaste, Su?.—dijo mi hermana.

—Beth, y-yo no...

—Bill, ¿por qué no viniste conmigo?

—Georgie...

A pasos pequeños nos acercábamos a ellos pero ellos quedaban quietos en donde estaban, mirándonos.

—Ahora verán, si vienen con nosotros, también flotarán.—dijeron a la vez y detuvimos el paso.

Comenzaron a repetir varias veces esa frase, pero con tonos mas fuertes, hasta que solo repetían lo último.

—También flotarán, también flotarán —desde lo profundo de la alcantarilla venía una figura oscura, era gigantesca. Con Bill retrocedimos unos pasos.— también flotarán, también flotarán, ¡También flotarán!

La figura aceleró el paso y lo pudimos distinguir, era un payaso.
Nos echamos a correr y pudimos salir de ese lugar tan oscuro.

Nos asomamos por la entrada pero no había nada. Solamente se escuchó la risa escalofriante de un payaso, entonces nos dirigimos corriendo hacia nuestras bicicletas.

Con la respiración agitada, llegamos.
—Creo que ya estamos a salvo...

—N-necesit-to desc-can-cansar, Susan.

Bufé.—Vamos Bill, tenemos que irnos.

—N-no puedo irm-me así. Est-toy tod-do mojado, dejame c-cambiarme.

Lo miré confundida, ¿por qué trajo ropa limpia? No íbamos a acampar .—¿Qué? ¿Trajiste ropa? ¿Por qué?

—Alg-go me d-dijo que ten-nía que traer rop-pa.—dijo y se quitó su camiseta.

Rodé los ojos.—¿Haces esto para impresionar? Porque siendo sincera no lo haces.

Él se cambió y nos subimos a nuestras bicicletas. Pedaleamos rápido.

Llegamos. Quedaba tiempo antes de que amanezca.

—Tenemos que descansar Bill, luego hablaremos de esto.—El chico asintió y entró a su hogar.

Abrí la puerta principal de casa y había algo extraño, giré mi cabeza y estaba mi hermano sentado en un sillón, mirándome.

—¿Dónde te vas todas las noches, Su?

—¿Y mamá?

—Está en mi habitación, no quiere hablar con papá—largué un suspiro.— y dime, ¿qué hacías con el niño Denbrough a estas horas jovencita?

—Nada.—No lo podía ocultar, no enfrente de mi hermano. Me acerqué y comencé a llorar.— La vi, Dylan. Está viva.

Él me abrazó, pero algo raro, como si estuviera enojado.

—¿Qué sucede?

—Nada, tranquila. Luego te lo explicaré, ve a tu cuarto y duerme. Pasaron muchas cosas hoy.

Asentí y subí las escaleras, no sin antes girar y ver a mi hermano sentado en el piso con las manos agarradas a su cabello.

Llegué a mi cuarto, cerré las cortinas y apagué mi lámpara.
Esta noche había sido extraña.

Espero que les haya gustado el capítulo de hoy.
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Besos😘
–xReaderSoulx