Beautiful mess ©

Capítulo 4.

— Así que... ¿Cómo harás eso sin arruinarlo? — Preguntó James con el ceño fruncido a la melliza —. No parece fácil.

— Cállate, me estoy concentrando — Murmuró Annie y miraba la imagen que se encontraba frente a ella con detenimiento, admirando cada detalle —. ¡Ya sé!

Gritó y salió de la sala de artes para después correr por todos los pasillos, esquivando a personas que se encontraban fuera de sus salones, tratando de correr lo más rápido posible y buscando el salón en donde se encontraba su amigo. Una vez que estuvo frente a la puerta, paró de golpe y entró apresurada, asustando al chico que se encontraba tocando la guitarra con su melodiosa voz.

— Te necesito ahora mismo — Se acercó a él y le quitó la guitarra que se encontraba sobre su regazo, lo tomó de la mano y en ese momento Matt podía sentir como su estómago se revolvía —. Necesito que me ayudes a plasmar un cuadro ¿Si?

Annie hizo un puchero y lo miraba con sus típicos ojos de súplica, y con eso fue suficiente para que el pelinegro cayera a sus pies, sin más, Matthew acompañó a la chica a la sola en donde estaba antes.

Al entrar, James lo miró con una ceja alzada y una pequeña mueca casi invisible para él, salió de la sala y dejó solos a los dos amigos que se dieron una mirada extrañada por tal comportamiento de la pareja de Annie.

— Esto es lo que quiero lograr, bueno... Mejorar — Señaló la chica al cuadro que tenían enfrente —. Pero no tengo ni la más mínima idea de cómo hacerlo.

Matt miraba atento al cuadro y no dijo palabra alguna, sólo se acercó al cuadro y tomó algunas pinturas para después perfeccionarlo. La melliza se sentó en un banco que estaba a un lado del chico y se dedicó a verlo.

***

La concentración en las clases era de lo más importante para Sophía, lástima que en esa ocasión no pudo tenerla.

— Pss — Tocaron su hombro y le dieron una leve sacudida. — Sof ¿me podrías prestar un lápiz? — Murmuró y soltó una risita.

Sophía lo ignoro y siguió poniendo "atención" a lo que es maestro de geometría decía.

— Sof, por favor dame un lápiz, no puedo hacer nada sin el lápiz. — Charlie seguía insistiendo pero la chica había llegado a su límite y estalló.

— ¡Por un carajo, Charlie, consigue tu estúpido lápiz con alguien más!

El jóven se escondió tras la banca con su rostro de un color carmesí de vergüenza, mientras que Sophía lo miraba con furia y los otros estudiantes miraban asombrados la escena.

— Muy bien jovencita, fuera de mi clase, al igual que usted señor Adams.

Los dos tomaron sus cosas y caminaron hacia la puerta y sabemos bien que Sophia no estaba de buen humor ahora.

— Eres un imbécil — Murmuró la chica y caminó rápido por los pasillos.

— ¿Disculpa? Yo sólo estaba pidiendo un maldito lápiz y no pudiste darmelo — La siguió por detrás con los puños cerrados, conteniendo su furia también.

— Deja de arruinarle el día — Exclamó Sof y se detuvo para verlo a la cara — Ve a molestar a otra persona déjame a mi en paz, ¡por favor!

Charlie la tomó de los hombros y se acercó lentamente hacia ella, Sophia se quedó estática y sintió los suaves labios del chico contra los suyos. Charlie se separó después de unos segundos y la miró.

— Nunca pidas que me aleje de tí.

Dió media vuelta dejando sola a Sophia quien ahora se encontraba en alguna especie de shock.

*

El mellizo se encontraba corriendo alrededor de la cancha tratando de calentar y distraerse de todo, con audífonos colocados en sus odios y su teléfono en la mano sosteniendolo con gran fuerza para evitar que se cayera, fue moviendo su cabeza al ritmo de la canción e hizo puño sus dos manos comenzando a golpear en el aire simulando tocar la batería.

Se consumió en ese aire de relajación para él y de pronto fue como si todo a su alrededor desapareciera, seguía corriendo y cerraba sus ojos para disfrutar de ese momento, una, dos, tres... Cinco vueltas más así bastaron para que Josh fuera a sentarse en las gradas y tomar un poco de agua, agitado y sudoroso por el ejercicio, sacó una toalla de su maletín y comenzó a pasarla por su cuello y cara, tratando de retener las gotas de sudor que caían de su frente.

Desconectó sus audífonos y puso toda la música en alto, de todas formas se encontraba solo en aquel gimnasio y podía hacer cualquier ruido posible sin que ninguna persona lo molestara. Volvió a repetir la acción de tocar la batería imaginariamente mientras algo de su banda favorita se reproducía a través de los altavoces.

Sometimes I give myself the creeps
Sometimes my mind plays tricks on me
It all keeps adding up
I think I'm cracking up
Am I just paranoid?
Or am I just stoned
I went to a shrink
To analyze my dreams
She says it's lack of sex that's bringing me down
I went to a whore
He said my life's a bore
So quit my whining cause it's bringing her down

"Basket Case" sonaba en lo alto y Josh hacía bailes un poco ridículos tratando de seguir el ritmo de la canción.

Sometimes I give myself the creeps
Sometimes my mind plays tricks on me
It all keeps adding up
I think I'm cracking up
Am I just paranoid?
Uh, yuh, yuh, ya

Grasping to control
So I better hold on

Repitió una vez más el coro y la parte final se acercaba, bajó de las gradas y se puso en medio de la cancha, rió por la ridiculez que estaba haciendo pero no le importó ni en lo más mínimo.

Sometimes I give myself the creeps
Sometimes my mind plays tricks on me
It all keeps adding up
I think I'm cracking up
Am I just paranoid?
Am I just stoned?

Y fue ahí cuando Josh terminó en el piso tal como una estrella de rock, de levantó entre risas y recogió sus cosas para después salir de allí.

Se dirigió a la sala de artes en donde seguramente iba a encontrar a su hermana y a su novio, aunque para ser sinceros... A Josh no le agradaba tanto James.

Caminó tranquilamente por los pasillos hasta llegar a aquella sala, en donde su hermana se encontraba sentada en uno de los bancos, a un lado de lo que se supone iba a ser su proyecto final, sin embargo Matthew era quien se encontraba frente a esta pintando.

Saludo a ambos chicos y tomó uno de los tantos cuadernillos de dibujo que se encontraba en los estantes y comenzó a dibujar algo sin sentido, los tres chicos se quedaron en toda silencio, hasta que Matt habló.

— ¿Por qué se fue James así? — Miro de reojo a la melliza y volvió rápidamente su vista a la pintura.

Annie se encogió de hombros sin encontrar alguna respuesta.

— No lo sé... Últimamente ha estado así y no lo entiendo.

— Es mejor que lo termines — Habló su hermano dejando confundido a los dos chicos por su respuesta — Simplemente él no te conviene, digo... Creo que mereces a alguien mejor

Josh nunca alzó la mirada y se mantuvo concentrado en el dibujo mientras que Annie se encontraba con la mirada en el suelo y en su rostro se podía ver un cierto dolor.
Matt la miraba desde su lugar y dió una sonrisa de lado para luego regresar a su trabajo.