Capítulo 15: Aventura eléctrica.

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Cuando llegamos a Uruguay, toda la cuidad quedo destrozado, sería otro problema de construcción cuando esto acabe, solo nos dirigimos hacia la autopista, aterrizamos ahí y de repente vimos caer unos relámpagos, toda la cuidad, estaba además que en llamas, estaba totalmente electrocutada, no pudimos movernos por la tensión y el ruido de los relámpagos, todos le temían a los truenos, rayos o relámpagos. No podíamos ir corriendo por las calles sabiendo que un rayo nos puede caer en la cabeza.
-¿Y ahora que?-preguntó Belen.
-Es hora de ....correr!!-dijo Bianca.
-Cuidado-dijo Sebastián.
Cuando empezamos a correr y habían montón de zombis electrocutados, nos detuvimos al frente de esos zombis eléctricos, Jair le disparo y la bala se electrocutó, a la vez subió y explotó. Ellos eran inmunes a las armas de fuego, no teníamos nada planeado, se acercaban poco a poco de todas las direcciones. Todo esto era una tormenta eléctrica en medio de una invasión zombi, nos tuvimos que gastar una granada que al tirarla y hacer contacto con la descarga la explosión fue muy, pero que muy fuerte, mando a volar a los zombis y a el equipo Rafaelino también. Estábamos tan heridos que necesitábamos alcohol para curarnos las heridas leves en todo el cuerpo de cada compañero, nos dirigimos a un hospital abandonado en medio de la cuidad, con la lluvia mojándonos, al entrar encubamos pasos que venían del siguiente piso, cuando miramos eran zombis también eléctricos.
-Es mejor que usemos el ascensor-dijo Andrea.
-No, no creo hay zombis en cada piso-dijo Kevin.
-Creo que tengo una idea-dijo Belen.
-Ya está es la parte en la que nos explicas-dijo Sebastián.
-Espero que la idea sea segura-dijo Melany.
-No es tan segura, pero hay que intentarlo-dijo Belen.
-Bueno, dinos-dijo Jair.
-El plan es que envés de subir por la escalera es mejor trepar después afuera del ascensor-dijo Belen.
-No sería mala idea-dijo Sebastián.
-Hay que hacerlo, no tenemos mucho tiempo-dijo Kevin.
-Vamos, suban-dijo Katy.
Al abrir la escotilla del techo del ascensor nos llevó hasta arriba, ósea el último piso, a la azotea y cuando llegamos no había nadie, era perfecto el plan de Belen, gracias a Dios encontramos lo que buscamos y nos curamos las heridas, bueno las que pudimos porque otras dejaban marca en la piel, apareció un Zombi eléctrico de la nada y le rasgo el ojo a Sebastián, ocasionándole la ceguera del ojo izquierdo, al votar al zombi del tejado, le pusieron un parche a Sebastián.
-Se ve más rudo-dijo Jair.
-Genial, ya perdí un ojo-dijo Sebastián.
-Al menos aún puedes ver-dijo Katy.
-Te vas a recuperar, ¿creo?-dijo Melany.
Cuando ya estábamos apuntó de bajar al primer piso, el agua y rayo se combinaron, ocasionando que todo los que este mojado, al pisarlo te electrocutes de inmediato, ya no había forma de salir de Uruguay, al volar con mucho cuidado nos dirigimos a un hotel y nos quedamos ahí a pensar un plan para sobrevivir a esta tormenta, destruir el portal e ir a Argentina. Cuando nos dormimos pasaron 7 horas y igual era de noche, pero de repente en el cielo se abrió un agujero soy se vio al sol, luego se tapo de nuevo, era de día, pero el reloj de mano marcaban las 1:00 de la mañana. Salimos del edifico y los truenos estaban parando, tuvimos canse de volar hacia el portal, al mirarlo también estaba electrocutado, esta fue Melany quien lanzó la granada desde tan lejos, al caer exploto con fuerza pero el portal no se destruyo, nos acercamos, lo miramos, ninguna rajadura.
-Se necesita más presión y fuerza de caída-dijo David.
-Oye, Andrea-dijo Sebastián.
-¿Que?-preguntó Andrea.
-¿Que sería lo más grande que pudiste a ver visto?-dijo Sebastián.
-Ahhh-dijo Andrea.
-Que les parece si usamos eso-dijo Sebastián.
-Nada mal-dijo Kevin.
-¿Como lo manejaremos?-pregunto Katy.
-Ya veremos-dijo Sebastián.
(Ruido de un trueno)
-Rápido, tenemos que ir, ya va volver el rayo-dijo Bianca.
Nos dirigimos hacia un avión ese avión era demasiado grande se podía ver a lo lejos en el aéreo puerto de Uruguay, cuando llegamos, era más grande de lo que creíamos, esta tormenta eléctrica nos hacía recordar a todos a Jaime; el murió para salvarnos. Cuando llegamos el avión tenía combustible, ni siquiera había ningún manual para poder conducir un avión más de 5000 kilos, creo que eran más que 5000 kilos.
-Ya viene los zombis-dijo Jair.
-No los dejen pasar, tenemos que reparar el motor-dijo Sebastián.
-Uff, esto demorará-dijo Katy.
Se acercaban los zombis, cada vez más y más.
-Fuera ingenuos del demonio,¡fuera!-dijo David.
-No hay porque decir, malas palabras-dijo Kevin.
-Un rayo cuidado-dijo Belen.
Cayó el rayo sobre todos los zombis, quemándolos en un instante, como quedaron freído en el piso, volvieron al avión, luego se preguntaron si entre eso zombis habían personas infectadas y ahora estas muertas.
-Listo y está-dijo Sebastián.
-¿Y ahora quién va a pilotar?-preguntó Katy.
-Sebastián, tu hazlo-dijo Melany.
-Ok,pero necesito un copiloto-dijo Sebastián.
-Ojalá, Jaime estuviera aquí, el si sabe pilotar-dijo Bianca.
-Jair, ¿lo intentaras?-preguntó Sebastián.
-Ok, hagámoslo-dijo Jair.
Cuando ya subimos y tomamos los controles, empezamos a subir al cielo.
-¡Sube, sube!-gritó Jair.
-Ya está-dijo Sebastián.
El avión empezó a volar, nos dirigimos nuevo al portal donde tiramos una granada desde lo alto, esto si fue un gran plan el portal de destruyo, (solo faltaban 3 portales por destruir) pero había un gran problema, este avión no resistirá mucho tiempo en el cielo y los rayos ya estaban cayendo a la tierra.
-¿Que hacemos ahora?-dijo Jair.
-Inclina el sombrero-dijo Sebastián.
-¿Se inclinará?-preguntó Andrea.
-¡Si!, mejor sujeten-dijo Sebastián.
Al inclinarse contra la gran tormenta dirigiéndonos a Argentina, el avión no resistiría mucho, estábamos en rojo y nos hirvamos a estrellar, al avión le cayó un rayo, empezó a quemarse, solo faltaba poco para salir de la ciudad, el motor se averió y dejo salir todo el combustible en medio del aire, el avión empezó a caerse, Sebastián, Jair y los demás estaban asustados, creían que llegó su final, el avión cayó poco a poco en picada saliendo de la ciudad, cuando ya estábamos cerca de Argentina el avión empezó a averiarse cada vez más y en eso llegamos a Argentina, el equipo Rafaelino aún estaba en el avión en llamas.
-Hay que saltar-dijo Belen.
-No, no debe a ver otra manera-dijo Katy.
-No hay alternativa-dijo Sebastián.
-Hay que saltar antes de que esto caiga-dijo Kevin.
-Estoy listo-dijo David.
-Yo casi nada-dijo Andrea.
-Tengo mucho vértigo-dijo Melany.
Al estar preparados para saltar del avión, además que teníamos vértigo y la sangre corría por nuestras venas, al dar el primer paso para saltar, ya era demasiado tarde.

PORTAL ZOMBIE (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora