Criminal; larry stylinson.

Prólogo.

En la vida conoces a personas buenas y malas. Hay muchas personas, quienes llegan a tu vida de forma instantánea y cuando se van, lo hacen como el viento, sin dejar rastro o huella, sin provocarte algún dolor o sentimiento alguno. Pero siempre, a lo largo de ésta, conoces a una sola persona capaz de crear un tornado en tu vida.
Llega también de forma inesperada, busca por lugares recónditos de tu corazón alguna debilidad, plantea las mejores estrategias para cuando se vaya, se lleve consigo mismo una parte de ti, la más esencial.
Entonces, todo sucede exactamente a como lo planeó. Y una vez que estás jodidamente enamorado no hay marcha atrás. Llegas a sentir tanto amor por él que cuando se va, tu vida empieza a desmoronarse. Lo sientes, sientes ese dolor punzante en tu corazón, sientes arder tu garganta, temblar de impotencia, sientes a tu corazón rugir, gritar, arañar y llorar mil veces sólo porque aquella persona que completaba a tu corazón se ha ido, y tras su marcha se llevó tu esencia.

A sus 24 años, Louis Tomlinson había perdido la cabeza, y no lo menciono con el fin de interpretar al joven perdidamente esquizofrénico o andando por los lugares como el jinete sin cabeza. No, me refiero a que el muchacho de ojos azules y cabello castaño, con alma de ángel se había enamorado de un sirviente a satanás, (hablando metafóricamente.)

Harry Styles de 22 años, era el causante de la agonía en el amor de su amado Tomlinson.

Por las cosas que ambos ejercían y por las actitudes que éstos dos demostraban, se podía considerar sin remedio alguno a Louis como lo bueno de todo lo malo que la vida tiene, y a Harry, tristemente como lo malo de todo lo bueno que  la vida tiene.
El caso es que ellos dos juntos creaban la vida.

Porque no importaba que Harry fuese un criminal, eso era lo que lo hacía ser así. No importaba que Louis fuese un buen joven de corazón noble.

Las cosas estaban destinadas a pasar, ellos estaban destinados a conocerse y a sufrir por las consecuencias de ambos.

Jamás imaginaron que la vida les haría una mala jugada, los problemas absorbieron el amor que yacía en ellos, el cual aunque no se mostrara era intensamente grande.

Dicen que todos somos constructores de nuestro propio destino. Pero, ¿es eso verdad?

No creo que Louis decidiera tomar el camino correcto para abandonar a Styles y sacarlo de su corazón.

O Harry no ser precavido, y perder por completo al amor de su vida, y encima de todo; condenado a pasar el resto de su vida tras las rejas.

"Estoy enamorado de un criminal. Tranquilo, todo estará bien."