3. Verdades Ocultas

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 "Sois de vuestro padre el diablo y queréis hacer los deseos de vuestro padre. El fue un homicida desde el principio, y no se ha mantenido en la verdad porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, habla de su propia naturaleza, porque es mentiroso y el padre de ella." 

Juan 8:44

El cielo estaba despejado al medio día tanto que su azul era más profundo y cálido; la gente cantaba coros en alabanza y despedida, los santos dibujados en los vitrales sonreían y seguían cantando como si estos pudieran aplaudir el compás de la canción. 

-Hermanos- dijo el Padre Flug - os espero el próximo domingo- se despedía, a algunos les bendecía, por otros preguntaba su ausencia y recordaba mantenerse firme ante las tentaciones que "El Enemigo" ponía delante de ellos en el día a día.

Cuando ninguna alma quedo en la iglesia y los vitrales estaban serios y solemnes  a la mente del Padre Flug se le vino por una extraña razón "1 Corintios 6:18" y "Gálatas 5:19" cosa que lo dejo dudoso y pensativo.

-Ahora que lo pienso, no he visto al Padre Black Hat ni a la Hermana Mariana- dijo para si mismo- es muy raro.

Cuando la calma se establece los ruidos antes mudos cobran fuerza y los oídos escuchan lo que antes no escuchaban. Se podía oír el cantar de las aves desde adentro, inclusive el pasar de la brisa a través de la hierba, también pudo escuchar un llanto -¿Quién está llorando?- se preguntó, siguió el sonido y se dio cuenta que venia de adentro de la iglesia, caminó entre las columnas, al dirigirse a la dirección del sollozo se percató que venia del confesionario. El sonido del llanto se aceleró, escuchó el chocar de la carne contra la carne, el llanto se convirtió en gemido y su corazón temió lo peor, "fornicación". Uno tras otro el ruido del chocar se volvía más violento y el gemido más angustioso hasta que en un punto volvió a reinar el silencio. En ese momento la duda entro en Padre Flug, tenía miedo de avanzar pero tampoco se podía quedar parado. Tomo aire y siguió avanzando hasta estar al frente del confesionario, miró el pasadizo y vio las dos puertas, la primera que estaba más próxima a él era donde tenía que estar el Padre para escuchar los pecados y perdonarlos, el segundo era donde el pecador se iba a confesar. Decidió ir por la segunda, al entrar vio a una Hermana limpiando el piso mojado con su sotana.

-Hermana Mariana ¿qué ha pasado aquí?- preguntó el Padre Flug en tanto observaba a la Hermana, vio su cara marcada y sudada, los ojos rojos, sus labios estaban como si hubieran sido mordidos y su mechón rojo se le pegaba a la cara del sudor - ¿por qué está mojado el piso?

-He estado llorando, Padre- dijo la Hermana Mariana que seguía limpiando el piso con su sotana.

-¿Y por qué has estado llorando?- preguntó el Padre Flug temeroso de la respuesta.

- He pecado, Padre.

-¿Qué clase de pecado?- siguió preguntando el Padre Flug.

-Ninguno que no se pudiera perdonar- dijo una voz desde el otro lado del confesionario.

-¿Padre Black Hat?- se sorprendió Flug- ¿qué ha pasado aquí?

-La Hermana Mariana solo vino a confesarse y ella es a veces muy apegada a la fe que cualquier cosa le causa gran conmoción.

-¿Por eso ha llorado hasta tal punto de mojar el piso?

- Lo del piso no es llanto- se burlo la voz.

-¿Qué?

-Eso no le importa Padre Flug, ahora por favor tengo que darle su penitencia a la Hermana.

-Lo siento- se disculpó Flug- me retiro, pero antes ¿pudieron verme dar el sermón hoy?

-Si Padre Flug, me encantó, lo pude ver con la Hermana Mariana antes de que se confiese. 

Al escuchar esas palabras se retiró mudo, en su mente sabía que algo andaba muy mal, ese día en las cuatro horas que dura el culto el Padre Flug no dio sermón alguno.

Villanos Au - Evil ChurchDonde viven las historias. Descúbrelo ahora