Apago el cigarro,
pero sigue encendido,
no trates tú, amor,
quédate conmigo,
aunque si te vas se apaga,
se apaga también mi llama.
Déjala encendida otra noche,
sé el cenicero de mis labios,
sé el papelero de mis poemas fallidos,
sé mi parca guardada en verano,
sé la mujer que vive a mi sombra,
pido lo peor para ti, lo sé,
pero por favor quédate conmigo,
sin ti me extingo
y no existo, eres testigo,
eres más fuerte que este soberbio desgraciado.
Te repito, no lo apagues, mi amor,
prometo darte placer,
y luego de ello,
ser frío.
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whisky y cajetillas
Poetrypoemas desde lo más sincero de mi corazón, algunos un tanto melancólicos y rencorosos. Espero tocar al menos un alma con estos escritos.