3 parte

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Al siguiente día desperté para dirigirme al trabajo, atendía en una biblioteca, para muchas personas tal vez era aburrido pero para mi era más, me agradaba el gran silencio y la tranquilidad que había en ese lugar, me sentía muy a gusto. El día se me paso volando, me dirigía a casa, al pasar por aquel parque de ayer me tope con la misma chica . Nos estrechamos las manos de saludo,
Eva: Que coincidencia de nuevo encontrarnos Dara.
Yo con la misma sorpresa, solo sonreí se me ocurrió una idea le pregunte si tenia tiempo para ir por un café, Eva dijo con una sonrisa en el rostro que si estaba bien.
Tuvimos una gran charla miraba cada gesto que Eva  hacía, sentía algo muy raro en mi interior eran emociones pero no de esas emociones normales era más bien. ¿Me comenzaba a gustar Eva? Nunca me había pasado antes algo así y con una chica, era algo que ni yo misma podía comprender.

Solo ellaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora