Parte sin título 3

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Estoy pensando en todo eso, en mi vida, en mi padre, en mi madre, en mi hermana, en mis amigos, en mi hámster rufus, mientras estaba en mi cama viendo en mi laptop un gameplay de un chico que jugaba a algún juego de slenderman. Era sábado en la tarde, y faltaba solo una semana para que comenzaran las vacaciones de verano, si no es que menos ya que el director de mi escuela estaba considerando dejarnos salir a partir del próximo jueves. Era un día soleado y agradable, la luz entraba a mi cuarto por la ventana que estaba justo en frente de mi cama e iluminaba casi toda mi habitación hasta alcanzar el borde de mi cama donde estaban mis pies, y de ahí para arriba había una refrescante sombra que proyectaba el techo y que me refrescaba por el calor del día.

Entonces mi pequeña hermana Sara, de apenas 12 años de edad, entro a mi cuarto, después de todo le gusta pasar tiempo conmigo. Muchas veces se queda en mi cuarto viendo películas o programas de televisión. A veces se pone a jugar videojuegos conmigo pero solo los que son más infantiles y divertidos para ella como el Mario bros, Mario Galaxy y pijama party. Muchas veces ha intentado quedarse viendo creepypastas o películas de terror conmigo pero siempre se acaba asustando y yendo a jugar con sus muñecas. No la culpo, muchas veces los niños pequeños son demasiado sensibles para soportar las cosas de miedo, en especial las niñas tan dulces e inocentes como mi pequeña princesita. 

Aunque ciertamente también conozco a muchas personas que desde pequeños iniciaron a ver películas de terror y podían soportarlo sin problemas y algunos incluso no sentían absolutamente nada.

-¿Que estás haciendo?

- Me pregunto con su dulce e infantil tono que tienes las niñas pequeñas

-Estoy viendo un vídeo de esos chicos que juegan videojuegos, ¿quieres verlo conmigo?

Ella me sonrió y soltó una risita, y vino dando saltitos hasta mi cama en donde se acostó junto a mí. Llevaba un vestido rosa con lunares blancos, calcetas blancas y sus pequeños y diminutos zapatitos. Su largo pelo lacio le llegaba hasta la mitad de la espalda.

Le pase una de las almohadas de mi cama para que se sentara y ya que se colocó en una posición cómoda le volví a dar play al video para seguir viéndolo, estuvimos así un buen rato viendo los videos y riéndonos, pero note en la cara de mi hermanita algo raro, pensé que era curiosidad o duda al no entender bien algunas de las cosas que estaba viendo, después de todo ella no está acostumbrada a ver esas cosas, y mi sospechas se confirmaron cuando ella me pregunto:

-¿Quién es él?

La pregunta me desconcertó un poco sin embargo no me sorprendió demasiado, pues si bien ella casi nunca mostraba interés por los youtubers que yo veía era comprensible que de vez en cuando sintiera curiosidad por alguno.

- Él es Dimondtrex454, bueno en realidad se llama Miguel Duglass pero ya ves que inventan apodos graciosos para sus canales.

Puso una cara un poco molesta mientras negaba con la cabeza.

-No no no, no el chico que está hablando, sino el hombre del que se está asustando, el del traje.

Mientras decía eso apunto con su pequeño dedito a la pantalla, y comprendí que se refería a slenderman y a pesar de que me parecía muy extraño que se interesara por un ser como ese, de aquellos que siempre suelen provocarle pesadillas, le empecé a explicar.

-Oh, él es slenderman, o en español el hombre delgado.

Me tomo por sorpresa el ver que en su cara aparecía una mueca de fascinación.

-¿Y quién es slenderman? ¿Y el que hace? ¿De dónde viene?.....

Me pareció muy gracioso el ver como despertaba en ella tanto interés por slender, y también lo ansiosa que estaba por saber más sobre él.

Me apresure a explicarle las cosas que sabía para calmarla con sus preguntas.

-Okey okey, calma Sara, te lo contare todo, él es un personaje que se hizo famoso gracias a un sitio web en donde aparecía al fondo de varias fotos con diversos niños y....

-¿Niños? ¿Por qué?

- Porque se supone que él se dedica a secuestrar niños, nadie sabe porque ni para qué, pero una vez que se lleva a alguno nadie vuelve a saber de él.

Mientras le decía esto le mostraba imágenes de el en google.

- Oh, ¿y porque aparece en las fotos?

- Como viste en el juego, él puede aparecer de la nada, y supuestamente el vigila por mucho tiempo a sus víctimas antes de hacerles algo, y se supone que cuando aparece ahí es porque sin que se dieran cuenta estaba en ese lugar observándolos.

Ella en verdad estaba fascinada con todo lo que le decía, me sentí feliz por ella ya que me recordaba a mi cuando me obsesionaba con videojuegos e igual que ella solo quería saber más y más, también me hizo sentir muy bien el poder decirle tantas cosas, me sentía inteligente, sabio, se sentía bonito que te trataran como si lo supieras todo.

-¿Y porque se ve así?

Con esa pregunta se abrió paso a una agradable plática que duro gran parte del da, yo inicia a contarle las historias sobre su origen, especialmente le conté con mucha fascinación la primera que conocí y mi favorita; la cual cuenta que el simplemente nació así, deforme, por alguna extraña razón no había podido tener rasgos faciales; el creció y trabajo casi toda su vida en un circo de fenómenos, sin embargo lo despidieron porque él era demasiado extraño y asustaba a la gente, y el, siendo ese el único lugar del mundo donde encajaba y era el único lugar donde lo aceptaba la sociedad, literalmente le quitaron todo lo que tenía y eso lo hiso enojar tanto, que mato a todos los del circo y se refugió en el bosque, en el cual mata a todo aquel que entre.

También le conté sus otras historias, le mostré los creepypastas, seguimos viendo juegos del el, incluso vimos unos de esos documentales falsos en donde hablan de casos de slenderman y de mitos en donde hablan de él como si fuera algo real. Aunque me preocupo un poco enseñarle esos últimos, ya que ella aún está bastante pequeña y podía creerse todo lo que dijeran ahí y eso la espantaría demasiado además de que tendría muchas pesadillas. Sin embargo ella parecía estar muy entretenida así que no le di importancia, y si por la noche no podía dormir por miedo o por tener pesadillas, la dejaría dormir conmigo para que se sintiera más segura y pudiera dormir tranquila.

Después de un rato así, consideré que sería igual divertido enseñarle a los demás personajes de las creepypastas y hablar sobre ellos, así que le propuse la idea a mi hermanita mientras iniciaba a buscar lo otro en mi computadora. Sin embargo justo cuando estaba empezando a buscar a algún otro personaje, Sara me metió un susto al gritarme que no, que siguiéramos viendo cosas de slenderman. Habíamos estado tan callados y había tan poco ruido en la casa que el simple hecho de que levantara la voz así basto para que casi tirara mi computadora al suelo, afortunadamente la sostuve mientras aún estaba en mis piernas evitando así un fatal accidente. A petición de mi hermana, seguimos viendo, leyendo y platicando sobre slender por lo que bien pudieron haber sido dos horas, hasta que llego nuestra madre y nos llamó para bajar a comer. Sara abandonó mi cama de un solo brinco y salió corriendo para bajar a comer mientras reía. Yo mientras tanto cerré lo que estaba viendo, mire el reloj-despertador que estaba en el estante al lado de mi cama; eran las 3:40 P.M.

Me sorprendió el ver que Sara y yo habíamos pasado tanto tiempo hablando sobre slenderman, ya que yo me había levantado a las diez de la mañana y Sara había llegado a mi habitación cerca de las 11:30 a.m.

Deje mi computadora a un lado mío y me levante para bajar a comer, el clima se había puesto más fresco y agradable. El sol brillaba con intensidad. El olor de la comida llegaba hasta mi cuarto y era un aroma realmente delicioso que me abrió inmediatamente el apetito e hizo que rugiera mi estómago. Inicie a bajar las escaleras para alimentarme de lo que sería una comida deliciosa que complementaria un día perfecto, sin saber que ese en realidad seria el ultimo día normal que tendría.

Las hijas de SlenderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora