Mi Familia

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Entre abrí los ojos, había sangre bajo de mí, ¡MI SANGRE!, logré sentarme y me sorprendí al ver que no tenía los agujeros en mi estómago ocasionados por las balas. Me dolía un poco el cuerpo pero me logré parar, intenté ir caminando a casa como pude.
"Me siento mal por no haber logrado comprarle las pastillas a mamá al final de cuentas"
"Lamento no haber ayudado a mi hermano"
"¿Donde estas papá?" "Dejaste a mamá enferma" "Te odio"

Llegando a la esquina, donde estaba mi casa al dar la vuelta logré escuchar ambulancias y patrullas, intenté avanzar un poco más rápido pero cuando llegué...mi casa era cenizas, aún sacaba humo. Mi respiración se detenía, no podía creer en lo que estaba viendo, quería que todo fuese una simple pesadilla, pero era más real que nada. Logré escuchar entre murmullos desde la distancia que me mantenía de mi casa (DE LO QUE ERA MI CASA) entre lágrimas escuché que decían que "no había sobrevivido nadie, que los cuerpos eran cenizas, incluso la señora y el niño que gritaban mientras la casa ardía". Al escuchar eso...grité entre más lágrimas, me escucharon las personas al rededor que murmuraban y corrí sin importar el dolor de mi cuerpo, no podía soportar todo esto.
Perdí a la única familia que cuidó de mi todo este tiempo, que me enseñó sobre la vida y nunca les pude agradecer, no pude despedirme de ellos.

Desde ese día me gané la vida a como pude, no volví a confiar en nadie durante unos años, le tenia un odio a todos, a cada ser humano, en nadie se podría confiar, y jure encontrar a los malditos que hicieron de toda mi pequeña vida un infierno y me oculté un una montaña cerca del pequeño pueblo en el que vivía.

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