Error 404

13 2 2
                                    

Despertó.
Camino hacia la puerta, saludo a su pequeño hermano, era tan adorable con sus pantuflas rojas y su pijama de superhéroes, siempre fantaseando con sus ojos color miel, sueños tan efímeros. Era una lastima que tuviera que terminar.
Camino dirigiéndose a la cocina, se encontró con su madre tomando un café y su padre tomando el desayuno, ambos ocupados, pero no lo suficiente como para no notar su presencia. Los saludo como de costumbre, tomo sus llaves, su mochila e intento acariciar al gato, quién le gruñó y araño la mano. ¡Oh no! ¿Qué acaba de hacer? No se imagina el lío en el que se metió. La furia se apodera de el, pero toma un respiro mientras su madre se acerca y le pregunta que ha pasado, el solo se aleja y decide que... Hay mucha gente, lo dejara pasar. No por mucho tiempo.

Hilos rojosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora