Mina como de costumbre caminaba a su casillero para sacar sus libros de quimica y dejar su almuerzo preparado con el amor de mamá. Un papel doblado perfectamente cayó del casillero al abrirlo, se dobló a tomarlo y notó en él las iniciales "I.N" escritas con la letra más perfecta que había visto jamás. La abrió extrañada y leyó en su mente lo que decía.
Hola hermosa eres como las rosas; tan pura y preciosa. Jamás había contemplado tan perfecto perfil hasta que el tuyo bendició mi vista.
-I.N
Sus ojos se tornaron completamente blancos por tan estúpido mensaje, el payaso que dejó aquello seguro no tiene una vida. Inmediatamente tiró la nota al basurero más cercano. A Mina le molestaban las personas así, que creen que con un buen piropo pueden hacerla caer tan fácil. Se iba más por la química y el momento, no por la prisa; una de las razones por la que es soltera y virgen en todo sentido. Pero no le molestaba, se sentía bien así.
Nayeon que de lejos la veía, hizo una mueca de dolor y giró a pegarle a su amigo que se reía con burla y retraso extremo.
-Ya cállate, Quico. -con sólo ese simple apodo Jimin había caído al suelo ahogandose en su propia risa.
El timbre había sonado y sin preocuparse por el enano en convulsiones Nayeon se fue al aula a esperar el momento oportuno en el que el León atacaría a su presa.
Mina escogió tres sillas al frente de Nayeon, antes de sentarse buscó con la mirada a sus amigas;en vez de eso chocó con la mirada de Nayeon, quien descaradamente le tiró una guiñada. La japonesa se volteó con una cara de trauma total, pensando en mil cosas aterradoras, Im Nayeon jamás la había mirado y aunque no era algo del otro mundo era aterrador.
-¿Por qué esa cara de pingüino traumado? -se trataba de Momo, una de las mejores amigas de Mina. Al contrario de ella Momo era más.. activa en su vida amorosa y sexual.
-¿Viste quién está atrás? Me tiró una guiñada.
-¡Oh por Dios! Im Nayeon... -comenzó a respirar agitadamente y se tomó el pecho- Te...-agitaba las manos exageradamente en busca de aire- guiñó.. -comenzó a hiperventilar.
Mina la miró como si fuese un engendro del diablo, y con un tono irritado dice: ¿En serio?
-Sí. -dice Momo, tornandose seria sin mirarla, saca su cuaderno y comienza a desahogarse. -Con mujeres así no me sorprende que hayan lesbianas, sólo digo...
Ninguna de las dos se habló hasta que Mina recordó lo que encontró hacía minutos.
-Por si te interesa, alguien me dejó una nota en mi casillero. La tiré porque pensé que era una broma, iugh. -la cabeza de Momo dio un giro de 350° y sus ojos penetraron los de la mayor con enojo.
-¿Por qué no me contaste eso antes? -se sintió ofendida- ¿Quién fue? ¿Es mujer, le gustas? ¿Es linda?
Nayeon escuchaba todo con claridad, su orgullo estaba aumentando con las palabras de la japonesa y se enorgullecía de que Mina hubiera mencionado su perfecta nota.
-No lo sé, pero debe ser una persona muy fea y sin vida; tales como un nerd. -como una daga, sus palabras atravesaron el autoestima y el orgullo de la mayor, tan rápido que no lo pudo esquivar.
Su punto débil era su belleza, por eso siempre perdía todas las peleas.
-Ay, Jimin, agarrame, mi.. corazón.. -el nombrado solo se reía al ver todo el drama que armaba su amiga-. ¡Jimin!
Todos en el aula miraron hacia el par, excepto Mina. Le parecía más interesante dibujar un pingüino que prestarle atención a lo que hacían los creidos por llamar la atención. Momo movió su brazo hasta alcanzar el hombro de Mina y la agitó hasta hartarla y lograr que se levantara de su asiento pegándole en el pecho.
-¡¿Qué te he dicho te tocarme, hija de..?! -cayó mentalmente y se percató de donde estaba parada, su semblante fruncido jamás cambió. Tomó sus cosas y se movió al asiento más lejano a su amiga, con las mejillas en llamas. Para su mala suerte le tocó atrás de Nayeon.
La clase comenzó y el NaMin no paraba de susurrarse y escribirse cosas sobre la japonesa. Habían descartado la idea de dejarle pequeñas notas en su casillero ya que las tiraría a la basura como hizo anteriormente. Nayeon no tenía ninguna idea, se estaba rompiendo la cabeza pensando pero sus fantásticas ideas llegaban como un eclipse solar; 1 vez cada 200-300 años. (según google yo no sé :v)
Se iba a dignar a olvidar el tema por un segundo y prestarle atención a la señora parada en frente dando explicaciones inútiles pero Jimin le dio un ligero empujón y le pasó un papelito que traía escrito su número telefonico. Se quedó mirando a la nada, pensando qué podría significar hasta que lo adivinó; dejarle su número en el casillero. Le sonrió a su amigo y sacó un papel limpió donde escribió lo que se le había ocurrido, bueno, lo que Jimin le había sugerido.
Jugaba con sus dedos esperando que la hora pasara y el día terminara rápido para continuar con su plan, y como si el mundo estuviera de acuerdo con aquello el timbre sonó. Tomó sus cosas y salió hacia la siguiente clase, y como siempre luciendo como una diva. Se posicionó en medio del corredor esperando a que la japonesa saliera para poder dar su espectáculo. Cuando por fin vio su rostro entre la multitud, sacudió su cabello de la forma más provocativa posible y pasó su lengua delicadamente por su labio inferior, acto seguido lo mordió y sonrió. Varios pararon a mirarla y otros la miraban de reojo, sin poder evitar apresiar su belleza. Pero la persona que ella quería y por la que hacía aquello, jamás la volteó a ver.
-Eso pasa cuando no eres suficiente.
-Te odio, zorra. -le dio un golpe en el hombro y continuó caminando.
El resto del día fue un cuento, uno muy aburrido y lleno de extrema concentración. Nayeon había estado siguiendo a la menor para examinarla, ver qué tan virgen era y, vaya que era una muy metida en su papel. Cada que algún chico se le acercaba su rostro se tornaba rojo y salía corriendo, tampoco permitía que sus amigas la tocaran fuera de lo normal. Y cuando hablaban de temas subidos de tono intentaba evitarlo o gritaba para que lo cortaran; Ese día hizo ambos.
-Se nota que vas a perder con esto. -ambos se miraron y Nayeon negó segura.
-Si pude hacer hetero al mariconcito de Jungkook, ¿Crees que no podré hacer esto? me subestimas pésimo.
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byebye innocence; minayeon
FanficDonde Mina es una inocente monja y Nayeon hace lo imposible para pervertir a la monjita.