Welcome to my diary

05 de Diciembre, 2017

Desde hace un tiempo he querido empezar a escribir un diario para escribir lo bueno y lo malo que pase en mi día a día. No quería iniciar en un diario convencional de esos que son a lápiz y papel, que tienes que guardar bajo siete llaves para q nadie lo lea y tampoco se enteren de mis más profundos pensamientos. Además, quería iniciar con algo nuevo, único y creativo. Es por eso que el día de hoy tome la decisión de iniciar esta especie de "diario" aquí en wattpad, ya que es el mejor lugar para esconderme bajo el anonimato, aquí nadie sabe quién soy ni de donde vengo. Lo más irónico en todo esto, es que el mejor lugar para esconder mis sentimientos y pensamientos es aquí, haciéndolos públicos y merced de cualquiera.

Mi vida no es la más interesante, pero si está llena de contratiempos y constantes decepciones que suelen destruirme por completo o me fortalecen. A mi parecer, este tipo de cosas te afectan más cuando eres joven e ingenua, yo solo soy una chica de 17 años que recién está empezando a vivir y a experimentar. A partir de este punto ya no soy una niña, estoy entrando al mundo de un adulto joven que va tener q empezar a valerse por si misma y pensar en mi propio bien. Tengo q empezar a experimentar, muchas chicas a mi edad ya han tenido experiencias sexuales con un chico o más de uno, mientras que yo recién comienzo con todo eso. Siempre he creído que los 17 es la edad perfecta para perder la virginidad, pero... ¿Vale la pena perderla si no es con amor? Cuando llegó mi cumpleaños número 17 esa fue una de las primeras cosas que pensé, quería dejar de ser virgen, pero no tenía un novio o un chico al que yo quisiera lo suficiente como para hacerlo, entonces no sabía si era lo correcto buscar a cualquier chico y simplemente hacerlo, sin amor, sin cariño y sin pensar como se debe estar sintiendo la otra persona. Estas ideas rondan constantemente mi cabeza... ¿Lo hago o no lo hago? Aveces no me importa encontrar a alguien y hacerlo y otras veces quiero a alguien q me quiera (valga la redundancia) que le importe, que me pregunte si me dolió, que me diga que soy todo para el y que, cuando terminemos de hacerlo, me abrace fuerte.